Pineapple Upside Down Cheesecake

Pineapple Upside Down Cheesecake

Eva 28 mayo, 2023
This post is also available in English

Llevaba un par de años con la idea de compartir con vosotros recetas retro o vintage. Una especie de “saga” que reuniera algunas recetas con origen entre los años 1920-1960. Los que me leéis hace tiempo, sabéis que siento especial devoción por este tipo de recetas y estilo. No sé si lo que me atrae tanto es la mezcla de composiciones algo horteras, pero elegantes. Con ese toque que quiere mostrar el interés por sorprender a nuestros familiares y amigos, pero a su vez que abusa un poco de un exceso de decoración. Creo que tienen un cierto encanto. Me gustan muchísimo. El caso es que, finalmente, tras reunir algunas recetas voy a compartir con vosotros este pequeño recetario con recetas de esta época.

La primera receta de este recopilatorio, es este Pineapple Upside Down Cheesecake. El famoso bizcocho de piña invertido, pero además, acompañado de una base de tarta de queso. La receta original consta únicamente del bizcocho de piña invertido. Pero al encontrar esta elaboración en la que se combinaban ambos elementos… No pude resistirme. ¿Quién puede decir no a una buena tarta de queso?

Mi idea inicial era solo elaborar el bizcocho de piña invertido. Una receta sencilla de llevar a cabo y que tendremos lista en pocos minutos. Pero entonces apareció esa maravillosa receta con la base de tarta de queso y ese nombre… Pineapple Upside Down Cheesecake. Imposible hacer la vista gorda a algo así. Por lo que al final pensé, de perdidos al río, e hice la receta con las dos elaboraciones.

En vuestro caso, si así lo deseáis, no tenéis que preparar las dos. Podéis hacer solo el bizcocho de piña o Pineapple Upside Down Cake, o incluso preparar la tarta de queso y omitir el bizcocho. Eso sí, ya os aviso de antemano que la combinación de las dos recetas en un mismo plato, es tremenda.

Pineapple Upside Down Cheesecake

Upside Down Cakes o pasteles invertidos.

Según la mayoría de los historiadores, fue a finales del siglo XIX cuando empezó a aparecer el término “upside down cake” – pastel invertido. Hasta ese momento, este tipo de tarta o pastel se conocía bajo el término “skillet cakes“- pasteles de sartén.

La razón de esto es que, hasta ese momento, los hornos no siempre eran accesibles, los skillet cakes nacieron de la practicidad. Se elaboraban en las populares sartenes de hierro fundido, conocidas como skillets, encima de los fogones. Los primeros pasteles invertidos se llevaban a cabo con frutas de temporada como manzanas y cerezas, la piña en conserva aún no se había inventado.

Una receta de origen francés, similar a esta elaboración, era la tarta Tatin de manzana, creada en la década de 1880. En mi web también tenéis esta opción con membrillos,esta con melocotón y esta con fresas y ruibarbo.

Según Gil Marks, que escribió sobre la tarta de piña para Tori Avey, el primer uso conocido del término “upside-down cake” fue en 1923, para una tarta hecha con ciruelas secas (hace como 10 años, qué fuerte, os dejé esta Upside Down Cake de ciruelas y mazapán y esta hecha con naranjas sanguinas).

Es probable que el nombre derivara de “upside-down pies“, que apareció en la década anterior.

Piña, un lujo no disponible para todos.

George Washington escribió que de todas las frutas, ninguna le gustaba tanto como la piña. Conoció esta fruta en Barbados y, más tarde, la compraba siempre que era posible a los capitanes de barco que comerciaban con sus mercancías trayéndolas de las Indias Occidentales. Fue uno de los pocos afortunados en disfrutar de esta fruta.

Era una fruta muy cara en aquella época, tanto era así que algunas anfitrionas alquilaban la fruta a los panaderos para exhibirla como centro de mesa, y luego la devolvían sin comer. La piña se alquilaba una y otra vez, hasta que esta se pudría. Este hecho me parece increíble… Una prueba más de lo poco que valoramos todo lo que, a día de hoy, tenemos a nuestro alcance. Somos unos privilegiados y no somos conscientes de ello.

En los libros de cocina británicos y estadounidenses de los siglos XVIII y XIX aparecen, ocasionalmente, recetas con piña. Pero la mayoría de ellas eran sólo instrucciones para cortar y servir la fruta cruda, o para conservarla. A medida que avanzaba el siglo XIX, se importaron más piñas de Florida, el Caribe y Centroamérica, con el consecuente aumento de recetas para utilizarlas. La mayoría eran recetas para preparar conservas, compotas y platos fríos como ensalada de piña, helado y crema bávara.

La fabricación de piña en conserva no comenzó hasta el año 1901, cuando Jim Dole fundó la Hawaiian Pineapple Company (ahora Dole Company) y empezó a producir y comercializar cantidades masivas de piña en conserva.

La piña se cultivaba en Hawaii desde principios del siglo XIX, y ya había fábricas de conservas en la década de 1880, pero ninguna de la envergadura de la de Dole. Esta tenía una máquina capaz de pelar, descorazonar y cortar 100 piñas por minuto. Pronto, él y otros productores hawaianos produjeron tanta piña que necesitaron una campaña publicitaria para convencer a los estadounidenses de que la compraran toda.

Pineapple Upside Down Cheesecake

Origen del Pineapple Upside Down Cake.

En el año 1925, la Hawaiian Pineapple Company patrocinó un concurso de recetas con piña en el que participaron jueces de la Fannie Farmer’s School, Good Housekeeping y McCall’s Magazine. Se dice que 2.500 de las 60.000 propuestas eran recetas de tarta de piña al revés o invertidas. La empresa decidió publicar un anuncio sobre la avalancha de recetas de tarta de piña invertidas que recibió, lo que conllevó la increíble popularidad de esta receta.

El ganador fue un pastel de piña al revés de la Sra. Robert Davis de Norfolk, Virginia. Dole promocionó ampliamente la receta ganadora de la Sra. Davis, y pronto el pastel de piña al revés se convirtió en uno de los pasteles más populares de Norteamérica.

Los pasteles de piña al revés o invertidos empezaron a aparecer en revistas, libros de cocina y anuncios. En el año 1927, se publicó un folleto titulado Aunt Sammy’s Radio Recipes, elaborado por la Oficina de Economía Doméstica del Departamento de Agricultura de EE.UU. y escrito por Ruth Van Deman y Fanny Walker Yeatman. El folleto era una recopilación de 70 menús y unas 300 recetas emitidas entre octubre de 1926 y junio de 1927 en los programas “Housekeepers’ Chat” del servicio de radio.

Las dos primeras impresiones de esta receta se encontraron en un libro de cocina benéfico de Seattle del año 1924 bajo el nombre de Pineapple Glacé y, en una revista femenina de 1925, había un anuncio a página completa de harina Gold Medal.

Las cerezas al marrasquino se habían hecho muy populares en Estados Unidos a principios del siglo XX, lo que podría explicar que se eligieran como guarnición de esta tarta. Es probable que en las tartas de los años 20 se utilizaran cerezas teñidas artificialmente.

Durante los años 30, el pastel se consideraba menos elegante, pero no por ello era menos popular. En un artículo de 1934 se afirmaba que “ninguna mujer puede considerarse realmente una repostera amateur acabada hasta que no haya horneado en algún momento de su carrera un pastel al revés“. En los años 30, había muchas recetas que hacían el pastel con otras frutas como el melocotón y el albaricoque. También en la década de 1930, la harina Omega publicó un anuncio en el que regalaba un molde de tarta al revés a quien comprara un saco de harina de 3 kilos.

Pineapple Upside Down Cheesecake

¿Qué ingredientes lleva el Pineapple Upside Down?

Se trata de un pastel realmente sencillo de llevar a cabo. Consiste en verter una masa de bizcocho sobre rodajas de piña que reposan en una base de azúcar moreno y mantequilla, con el que podemos elaborar una especie de caramelo. Normalmente se elabora en una sartén o skillet, aunque hoy en día podemos hacerlo en un molde al horno. A veces se añaden nueces pecanas y cerezas al marrasquino o confitadas. Aunque estas últimas son muy habituales puesto que aportan una nota de color.

Posteriormente se hornea y, finalmente, se vuelca sobre una fuente de modo que la parte inferior se convierte en la superior. De ahí su nombre “al revés” o “invertido”.

Pero… Vamos a darle un pequeño giro. Además de preparar este maravilloso Pineapple Upside Down Cake, elaboraremos un suave y delicado cheesecake o tarta de queso para disponer en la parte inferior, a modo de base. La textura de este pastel de queso recuerda, mucho, a una mousse. El sabor a queso es intenso… Cada cucharada se deshace en la boca. Una auténtica delicia.

Por supuesto, la base de la tarta de queso no podía ser otra que la famosa base de galletas majadas y mantequilla.

Por mucho que he buscado, no he podido encontrar el origen de esta increíble combinación; tarta de queso y pastel de piña invertido o Pineapple Upside Down Cheesecake. He visto muchas recetas e incluso una receta de The Cheesecake Factory, pero no se detalla quién fue el creador. De modo que si alguno de vosotros lo conoce, estaré encantada de leeros para ¡poder actualizar el post!

Receta Pineapple Upside Down Cheesecake

PARA EL CHEESECAKE:

Base de galletas:

  • 230 g galletas, tipo Digestive
  • 110 g mantequilla sin sal

Cheesecake:

  • 1375 g crema de queso
  • 315 g azúcar
  • 125 g nata líquida para montar
  • 5 huevos L
  • 4 yemas de huevos L
  • 3 cucharaditas de extracto de vainilla natural

PARA EL BIZCOCHO DE PIÑA:

Topping:

Bizcocho piña:

  • 280 g harina floja de repostería
  • 125 g mantequilla sin sal, temperatura ambiente
  • 70 g nata líquida para montar
  • 85 g leche entera
  • 2 huevos L
  • 9 g levadura química o impulsor
  • 3 g sal

MATERIAL QUE NECESITAREMOS Y VISIBLE EN EL VÍDEO:

*En los productos marcados con asterisco, tenéis un 5% de descuento en la web de Claudia&Julia con el código BAKESTREET

Elaboración

PRIMER DÍA

Preparamos la base de galletas.
  1. En un procesador de alimentos introducimos las galletas y procesamos hasta pulverizar por completo. Si lo deseamos, podemos introducir las galletas en una bolsa tipo zip y machacarlas con ayuda de un rodillo.
  2. Volcamos las galletas trituradas en un bol y vertemos la mantequilla fundida. Mezclamos hasta homogeneizar por completo.
Preparamos el molde.
  1. Forramos un molde cuadrado con papel de horno, para ello tendremos que engrasar toda la superficie interior con mantequilla o spray desmoldante.
  2. Disponemos la mezcla de galletas en la base del molde. Alisamos la superficie con ayuda de una cuchara o un rodillo pequeño.
  3. Horneamos a 175ºC durante 8 minutos.
  4. Sacamos y reservamos sobre una rejilla.
Preparamos el cheesecake.
  1. Precalentamos el horno a 175ºC con calor arriba y abajo. Introducimos, a media altura, una fuente amplia con agua hirviendo. El cheesecake lo hornearemos al baño maría.
  2. En el bol de la KitchenAid introducimos la crema de queso junto con el azúcar y la vainilla. Mezclamos con la varilla para suavizar la textura.
  3. Comenzamos a incorporar los huevos, lo haremos de uno en uno y esperando a que se haya integrado por completo antes de añadir el siguiente. Siempre que sea necesario, pararemos la amasadora y bajaremos la crema de los laterales con ayuda de una espátula de silicona.
  4. Una vez que hayamos incorporado los huevos, añadiremos las yemas. Lo haremos en dos tandas y esperando a que se haya integrado por completo antes de añadir el siguiente.
  5. Finalmente, añadimos la nata y mezclamos hasta homogeneizar.
  6. Vertemos la mezcla en el molde, sobre la base de galletas, y horneamos al baño maría durante 1 hora y 20-30 minutos. Nos fijaremos en la parte central de la tarta de queso, no debe estar hundida, sino recta. Al mover el molde, la cheesecake estará "bailonga", veremos que tiene un vaivén. Cuando queden los últimos 20 minutos de cocción, reducimos la temperatura a 160ºC y retiraremos el calor superior.
  7. Pasado el tiempo de cocción, apagamos el horno y con la puerta cerrada, dejamos reposar la cheesecake dentro durante 1 hora.
  8. Sacamos del horno, sin desmoldar, dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.
  9. Cubrimos la superficie con film y refrigeramos hasta el día siguiente.
    Pineapple Upside Down Cheesecake

SEGUNDO DÍA

Desmoldamos.
  1. Desmoldamos el cheesecake. Mi intención inicial era sacarla con las tiras de papel de horno que preparé en el molde... Pero no funcionó. Para desmoldar esta tarta de queso en un molde fijo y no desmontable, tendremos que voltear la cheesecake sobre un plato amplio y volver a voltearla para colocarla en la posición correcta.
  2. Es importante usar cuadrados de teflón o papel de horno cuando la volteemos, para evitar dañar la superficie. En el vídeo os muestro cómo hacerlo.
Preparamos el topping para el bizcocho de piña.
  1. Usaremos el mismo molde en el que preparamos la cheesecake. Lo lavamos bien y volvemos a forrar el interior con papel de horno a excepción de la base. Esta solo la engrasaremos con mantequilla.
  2. En un cazo añadimos la mantequilla, 65 g, y azúcar mascabado, 120 g, del topping. Colocamos a calor medio bajo y dejamos que se fundan por completo.
  3. Seguidamente, vertemos este "caramelo" en el interior del molde y extendemos procurando que cubra toda la base de este.
  4. Decoramos la base con rodajas de piña, cerezas confitadas y nueces pecanas. En mi caso os he dejado una sugerencia de presentación, pero podéis llevar a cabo aquella que más os guste o se ajuste a la forma de vuestro molde (redondo, cuadrado o rectangular).
  5. Reservamos a un lado.
    Pineapple Upside Down Cheesecake
Preparamos el bizcocho.
  1. En el bol de la KitchenAid añadimos la mantequilla junto con el azúcar. Mezclamos con la varilla hasta lograr una textura ligeramente cremosa.
  2. Comenzamos a incorporar los huevos, lo haremos de uno en uno y esperando a que se haya integrado por completo antes de añadir el siguiente.
  3. Mezclamos la harina junto con el impulsor y la sal, reservamos.
  4. Cambiamos la varilla por la pala y procedemos e incorporar, de manera alterna, los ingredientes secos y líquidos. Añadimos un poco de la mezcla de harina, a la vez que mezclamos a la velocidad más baja, alternando con la leche, la vainilla y la nata.
  5. Mezclaremos solo hasta que no queden restos de harina, cuidado con sobre mezclar la masa de bizcocho.
Volcamos al molde y horneamos.
  1. Volcamos la masa de bizcocho en el molde que teníamos reservado, y sobre las frutas. Alisamos la superficie.
  2. Horneamos a media altura a 175ºC con calor arriba y abajo durante 35-40 minutos. Antes de sacarlo, comprobaremos que el bizcocho está listo. Para ello pinchamos con un palillo en la parte central del bizcocho, este debe salir limpio o sin restos de masa adheridos.
  3. Sacamos del horno, dejamos reposar 2 minutos en el molde y procedemos a desmoldar.
  4. Debemos voltearlo, del mismo modo que hicimos con el cheesecake.
  5. Colocamos un plato amplio y, con mucho cuidado de no quemarnos, volteamos.
  6. Podemos dejarlo templar o enfriar antes de colocarlo sobre el cheesecake, como prefiramos.
Montamos nuestro Pineapple Upside Down Cheesecake.
  1. El último paso será colocar el bizcocho de piña sobre el cheesecake. Para ello nos podemos ayudar de una pala (como las de pizza) o espátula de pastelería grande.
  2. Colocaremos el bizcocho de piña sobre el cheesecake, con mucho cuidado, y procurando ajustarlo lo mejor posible.
  3. NOTA: En caso de que nos quedara un hueco amplio entre el bizcocho y las rodajas de piña de la superficie, una vez horneado, podemos rellenar esos huecos con nueces pecanas cortadas longitudinalmente.
  4. Servimos.
    Pineapple Upside Down Cheesecake

Notas

  • En la base del cheesecake podemos usar la variedad de galletas que deseemos. En mi caso uso unas similares a las Digestive porque me gustan mucho su sabor, pero podemos elegir las que más nos gusten o prefiramos.
  • Es importante usar una buena crema de queso puesto que el sabor del cheesecake estará condicionado por este ingrediente. Usamos mucha cantidad.
  • Mi molde cuadrado es este. Es ideal para elaboraciones que se hornean al baño maría, además que es muy fácil de desmoldar si seguís los pasos que os detallo.
  • Es muy importante hornear el cheesecake al baño maría para favorecer que quede jugoso y evitar que la superficie se raje o agriete.
  • Sabremos que la cheesecake está lista cuando toda la superficie esté recta. Observaréis que a medida que lo horneamos, la parte central estará ligeramente hundida y este irá adquiriendo volumen conforme se hornea. Tampoco debemos exceder el tiempo de cocción para evitar que nos quede seco.
  • No debemos omitir el reposo final del cheesecake en el horno con la puerta cerrada para favorecer que vaya perdiendo temperatura de manera gradual y evitar que la superficie se agriete.
  • Debemos dejar reposar durante toda la noche la cheesecake en el frigorífico para que adquiera consistencia, nada más hornearlo estará extremadamente tierno.
  • Con el excedente de claras podemos preparar un Molotof, pudin de claras, macarons, tronco de merengue, pavlova...
  • En caso de que vuestro molde sea como el mío, no se puede desmontar, debéis desmoldar del modo en el que os muestro en el vídeo.
  • Para hornear el bizcocho, usaremos el mismo molde que utilizamos para hornear el cheesecake. Necesitamos que tenga la misma forma.
  • En mi caso forré los laterales del molde, para evitar que el bizcocho se adhiriera, pero la base no. En esta solo untaremos ligeramente un poco de mantequilla para, posteriormente, verter el caramelo.
  • Si lo deseamos, podemos usar piña fresca en lugar de piña enlatada.
  • La decoración del bizcocho pineapple upside down cake siempre se lleva a cabo con piña y cerezas confitadas. En algunos casos, también con pecanas. Os dejo una sugerencia de presentación, pero podéis llevar a cabo el diseño que prefiráis.
  • Cuando preparéis el bizcocho de piña, debemos mezclar la masa batida solo hasta que no queden restos de ingredientes secos. Nunca debemos sobre mezclar la masa, de lo contrario nos puede quedar un bizcocho más denso.
  • Una vez horneado el bizcocho, dejaremos reposar solo un par de minutos para proceder a desmoldarlo. Si dejamos enfriar el bizcocho en el molde, la base con las frutas y el caramelo, se quedará adherida.
  • Tened mucho cuidado al desmoldar el bizcocho porque este estará muy tierno. Y tened cuidado de no quemaros.
  • Una vez que haya enfriado o templado, colocaremos sobre el cheesecake y serviremos. En caso de servirlo templado, recordad atemperar el cheesecake antes de colocar el bizcocho sobre él.
  • Se puede conservar, refrigerado, durante 4-5 días.
    Pineapple Upside Down Cheesecake

Espero que os animéis a probar esta maravilla, Pineapple Upside Down Cheesecake, porque os adelanto que es una auténtica maravilla. Combina dos elaboraciones que casan muy bien, disfrutando de toques dulces, cítricos, frescos, sin olvidar un sin fin de texturas. La tarta de queso es... De verdad, ¡extraordinaria!

Por otro lado, llevo un tiempo queriendo dar un giro a mis vídeos. Iré poco a poco, pero me encantaría saber que os van pareciendo estos cambios.

¡Os deseo que paséis un maravilloso domingo!

Un abrazo inmenso,
Eva

Fuentes:What's Cooking America, Quaint Cooking, Revolutionary Pie

Vídeo recurso "Mano vintage retro radio" de Yaroslav Shuraev en Pexels

Este post contiene enlaces afiliados.

Archivado en

relacionadas.