Chili vegano con chocolate

Si lo que queréis es combatir estos días tan fríos con un plato poco aburrido, os recomiendo que probéis este chili vegano con chocolate. Sí, ¡con chocolate! Como ya os habréis imaginado, este elemento fue el principal responsable de que mis ojos hicieran chiribitas y me pusiese de lleno con él. Vale, el picante también.

Que me gustan los platos muy condimentados y picantes no es ningún secreto, ya lo sabéis, lo que es de extrañar es que aún no me había dado por probar un chili casero. He probado muchos, muy buenos, fuera de casa y ya era hora de animarse a prepararlo casero. La receta es de Sarah Britton de su libro “My New Roots“, he modificado algunas cosillas, pero pocas.

El chili tradicionalmente se elabora con carne pero, en este caso, decidí seguir esta receta y hacerlo vegano. Muchos de vosotros me escribís pidiéndome recetas veganas y pensé que esta opción os podría gustar.

Se trata de una sopa espesa condimentada y bastante picante, acompañada de frijoles negros y chile. En la receta que os dejo, además, va acompañada de verduras y semillas que le aportan más textura y nutrientes.

El origen del chili es un tanto incierto y desconocido, hay grandes debates acerca de él. La receta estadounidense consistía en carne seca, manteca, chile seco y sal. Una de las opciones, sostiene, que el chili con carne nación en Ensenada, México en la década de 1880 con la finalidad de aumentar las raciones debido a la poca cantidad de carne disponible.

El desarrollo del chili con carne tuvo lugar en Texas y en el sureste de los Estados Unidos.

Una de las leyendas más populares cuenta que fue el espíritu de una monja española quien dio la receta a los indios del norte de México.

A pesar de que el chili con carne tiene influencia estadounidense, hay evidencias de que la idea y receta original provienen de los conquistadores españoles que fueron a México en el s. XVI.

La llegada de las Chili Queens.

En 1880 las famosas “Chili Queens“, pioneras en la región al utilizar sus habilidades culinarias para sobrevivir en las calles de Texas, ya vendían comida mexicana en las plazas públicas de San Antonio. Por otra parte, los historiadores, aseguran que el chili no figuraba entre los platos que se vendían en San Antonio. Los norteamericanos no distinguían sabores, a parte del picor del chile, lo que hizo que llamaran de manera genérica a todo lo que se vendía como “chili”.

Gozaba de muy mala reputación y se veía como una comida sucia, lo que llevó a la eventual desaparición de las Chili Queens.

La receta que os dejo poco o nada tiene que ver, a no ser que tengamos en cuenta los frijoles negros y el picante. Por lo demás podría considerarse un guiso, un tanto especial, y muy bien condimentado. De lo que sí estoy segura es que os ayudará a combatir estos días de invierno y a disfrutar en cada cucharada 😉

Vaso de cristal Mediterranea  de Claudia & Julia.

INGREDIENTES PARA 6 RACIONES:

PARA EL CHILI:

• 150 g de frijoles negros secos (cocinados pesarán 350 g aprox.)
• 800 g de tomates de rama
• 2 batatas medianas
• 4 pimientos italianos rojos
• 2 cebollas grandes
• 4 dientes de ajo grandes
• 250 g de maíz enlatado sin azúcar
• 1 cucharada de comino en polvo
• 1 cucharada de cilantro en grano
• 30 g de cacao en polvo sin azúcar
• 3 chiles de Cobán
• 1/2 cucharadita de canela en polvo
• 3 clavos de olor
• 1 cucharada de tomillo seco
• 1/2 cucharadita de pimienta negra recién molida
• 1 cucharada de hojas de orégano fresco ó 1 cucharadita de orégano seco
• 4 hojas de laurel
• pizca de cayena en polvo
• 1 cucharadita de sal
• 30 g de aceite de oliva
• 340 g de agua
• zumo de una lima grande
• 1 cucharada de Sirope de Arce

PARA SERVIR:

• 50 g de semillas de calabaza tostadas
• cilantro fresco
• orégano fresco
• rodajas de lima

ELABORACIÓN:

Preparamos los frijoles negros.

LA NOCHE ANTERIOR

1. Ponemos en remojo las judías negras, cubriremos con agua completamente, tapamos con film y dejaremos 12 horas a temperatura ambiente.

AL DÍA SIGUIENTE

1. Escurrimos las judías y lavamos con agua fría.
2. En una cacerola  añadimos las judías negras junto con el agua y colocamos a calor medio alto. Una vez que rompa a hervir, añadimos una pizca de sal.
3. Dejamos que se cocinen a fuego medio durante 1 y 1/4 horas ó 1 y 1/2 horas, hasta que estén tiernas pero sin sobrepasar el tiempo de cocción. No queremos que se nos deshagan.
4. Escurrimos bien y reservamos.

Escaldamos los tomates.

1. Llenamos una olla amplia con agua y colocamos a calor medio alto, dejamos que llegue a ebullición.
2. Mientras lavamos los tomates y realizamos un corte en cruz, no profundo, por la base del tomate.
3. Una vez que rompa el agua a hervir, introducimos los tomates y los escaldamos.
4. Dejamos durante 2 minutos.
5. Sacamos con una espumadera y pasamos por agua fría.
6. Ahora podremos retirar la piel del tomate con mucha facilidad. Una vez que hayamos retirado la piel de todos, troceamos y reservamos.

Preparamos el chili.

1. Lavamos muy bien las batatas para retirar restos de tierra, reservamos. Lavamos los pimientos rojos, reservamos.
2. Pelamos las batatas.
3. Troceamos las cebollas, los pimientos rojos y las batatas.
   
4. Cortamos los dientes de ajo en brunoise, reservamos.
5. En un mortero, majamos el cilantro en grano. Reservamos.
6. En una cacerola grande añadimos el aceite de oliva y colocamos a calor medio. Añadimos el comino en polvo junto con el cilantro majado, dejamos un par de minutos removiendo de vez en cuando.
7. Incorporamos la cebolla troceada junto con la sal y dejamos durante 7-8 minutos. Deberá volverse tierna.
8. Añadimos el ajo y dejamos durante un par de minutos más. Removeremos de vez en cuando para evitar que se adhiera al fondo de la olla.
9. Añadimos las especias junto con el cacao en polvo y cocinamos durante un par de minutos, removeremos constantemente. Es probable que la mezcla se vuelva seca, añadid un poco de agua (puede ser el de la cocción de los tomates) para darle ligereza.
10. Incorporamos el pimiento rojo junto con la batata, los frijoles negros, los tomates escaldados troceados, el sirope de Arce y el agua. Tapamos y dejamos que llegue a ebullición.
11. Reducimos a calor bajo y dejamos, en una cocción muy suave y removiendo de vez en cuando, durante 20 minutos. Las verduras deberán estar tiernas.
12. Añadimos el zumo de lima, el maíz y mezclamos. Rectificamos de sal si lo deseamos.

Servimos.

1. Repartimos el chili en boles amplios.
2. Decoramos con hojas de cilantro y orégano frescas, las semillas de calabaza y unas rodajas de lima.
   

NOTAS:

• Podéis cambiar el aceite de oliva por Ghee, aunque ya no sería vegano. Los matices de mantequilla y fruto seco dan un aroma interesante.
• Si no tenéis sirope de Arce, podéis cambiarlo por miel sin problemas.
• ¿Puedo utilizar judías de bote? Si lo deseáis, sí. En mi caso prefiero elegir la variedad y cocerlas en casa, pero sis libres de utilizar las otras.
• ¿Puedo usar tomate natural enlatado? Si queréis, podéis, pero el sabor no sé como resultará.

Os garantizo que este chili vegano con chocolate no os dejará indiferentes, tanto por su sabor como combinación de ingredientes. A mi me ha encantado, espero que os animéis con él y me contéis que tal os ha ido 😉

Saludos,
Eva

Fuentes: Chili Cook Off, Las Ficheras.