Tarta de calabaza y chocolate al caramelo

Tarta de calabaza y chocolate al caramelo

Eva 11 marzo, 2016

Llevaba varios días con antojo de tarta de chocolate y había que ponerle remedio no tardando demasiado… La verdad que pensé varias opciones, porque tengo una gran lista de pendientes, pero al final me decanté por una mezcla de recetas dando lugar a esta tarta de calabaza y chocolate al caramelo.

Hacía tiempo que tenía vista esta tarta de calabaza en la web de Delicious, he de reconocer que lo que más me gustó fue la decoración superior de la tarta. El crujiente de pipas de calabaza junto con la gran capa de crema (en la receta original es yogur de coco) me enamoró inmediatamente… sí que es cierto que la receta de la tarta en sí no me terminaba de convencer demasiado, así que la sustituí por la receta de Martha Steward. El conjunto es para empezar y no parar, de hecho ni para cortar un trozo! Directamente con la cuchara en el molde 😉

Esta tarta es más tradicional de finales de otoño principios de invierno, relacionándose con fechas como Halloween, Acción de Gracias y Navidad. Pero creo que cuando una elaboración está buena se puede consumir en cualquier momento del año. Véase el mazapán que comería a todas horas.

Este pastel, normalmente, lo elaboran con un puré de calabaza enlatada o un relleno especial para este tipo de tartas, creado a partir de la variedad Cucurbita, que ya viene incluso especiado. Yo no soy muy dada a utilizar mixes ni preparados, nos hacen perder un control absoluto sobre lo que estamos ingiriendo principalmente azúcares, sal e infinidad de -E. Así que, en mi caso, prefiero hacerla con calabaza natural, se tarda muy poco en cocerla y nos asegura conocer en todo momento qué ingredientes, y sobre todo qué cantidades, son las que llevan nuestra elaboración.

La calabaza tiene su origen en América del Norte y de ahí se exportó a Francia, de donde partió para Inglaterra. Su textura fue rápidamente acogida y aceptada como relleno de tartas. Durante el s. XVII se podían encontrar recetas del pastel de calabaza en libros de cocina en inglés como el de Hannah Woolley, “The Gentlewoman’s Companion“, publicado en el año 1675. Por el contrario, las recetas de este pastel no aparecieron en libros de cocina americana hasta principios del s. XIX. A partir de esta década fue cuando el pastel de calabaza comenzó a formar parte de la cena de Acción de Gracias.

El método de cocinar el pastel de calabaza cambió en Nueva Inglaterra, la pulpa de calabaza era acompañada de manzana, especias y azúcar para hornearlo todo junto.

No es la primera vez que preparo pastel de calabaza en casa, ya sea el tradicional o ligeramente cambiado. De hecho en el blog podréis encontrar otras dos recetas que os dejé hace un tiempo en la sección de “Recetas en Cuentos“. Una era la versión normal y más tradicional, Pumpkin Pie, y la otra con el relleno clásico y una base de chocolate acompañado de merengue con chocolate también, Dark Pumpkin Pie.

La versión de hoy uno lo mejor de las dos anteriores, pero con una variedad en el chocolate y es ese toque de caramelo que la hace irresistible, y además la acompañaremos de una buena cobertura de mascarpone con un crujiente de pipas de calabaza. La receta perfecta para hacer este fin de semana que promete ser fresquito.

Como siempre os deseo que paséis un estupendo fin de semana y nos vemos de nuevo el lunes 😀

Saludos,
Eva {Mrs Hudson}

Tarta de calabaza y chocolate al caramelo

INGREDIENTES PARA UN MOLDE ONDULADO DE 26 CM DE DIÁMETRO Y 6 CM DE ALTURA:

Receta adaptada de Martha Steward y Delicious.

PARA LA BASE DE GALLETA:

  • 18 galletas de tipo Digestive, unos 295 g aproximadamente
  • 120 g de mantequilla fundida y enfriada
  • 40 g de azúcar moscabado oscuro
  • 1/2 cucharadita de canela (1/2 tsp)
  • 1/2 cucharadita de sal (1/2 tsp)
  • 60 g de chocolate negro 70%

PARA EL RELLENO DE CALABAZA Y CHOCOLATE AL CARAMELO:

  • 250 g de puré de calabaza
  • 3 huevos de tamaño L
  • 190 g de leche evaporada
  • 90 g de azúcar moscabado oscuro
  • 1  cucharada de Maicena (1 Tbsp)
  • 1 y 1/2 cucharadita de sal (1 y 1/2 tsp)
  • 1 cucharadita de canela (1 tsp)
  • 1 cucharadita de jengibre (1 tsp)
  • 1/4 cucharadita de nuez moscada (1/4 tsp)
  • 1 cucharadita de pasta de vainilla (1 tsp)
  • 120 g de chocolate al caramelo de Valor
  • 40 g de mantequilla fría cortada en cubos

PARA DECORAR:

  • 30 g de semillas de calabaza
  • 60 g de sirope de Arce (puede sustituirse por Golden Syrup)
  • 500 g de mascarpone a temperatura ambiente

ELABORACIÓN:

Comenzaremos cociendo la calabaza para elaborar el puré. 

Cortamos rodajas y troceamos en cuartos, si queréis podéis cocerla con la cáscara porque tras la cocción será muy fácil retirarla. Introducimos en una cacerola mediana, cubrimos con agua, colocamos a fuego medio y dejamos hasta que al pincharla esté tierna. Nos llevará alrededor de 30-35 minutos.

Retiramos del calor, escurrimos el agua y dejamos que enfríe mientras preparamos la base de galletas.

Elaboramos la base crujiente para la tarta.

En un bol pequeño fundimos la mantequilla en el microondas, reservamos.

En un procesador de alimentos añadimos las galletas, ligeramente troceadas, y trituramos. Pasamos las migas a un bol mediano e incorporamos el azúcar moscabado junto con la canela y la sal, mezclamos ligeramente.

Añadimos la mantequilla, fundida y ligeramente enfriada, y mezclamos con ayuda de una cuchara hasta obtener una mezcla homogénea.

Precalentamos el horno a 175ºC con calor arriba y abajo.

Repartimos la mezcla de galleta por el molde. Rellenaremos primero la base y después los laterales procurando que sea uniforme. Presionaremos, ligeramente, con ayuda de un vaso para unificar la mezcla y procurar darle el mismo grosor.

Introducimos en el horno alrededor de 10 minutos.

Mientras troceamos el chocolate negro 70% muy finamente. Sacamos el molde del horno, con cuidado de no quemarnos, y espolvoreamos por la base el chocolate troceado. Volvemos a introducir en el horno durante un minuto más. Sacamos de nuevo el molde y con la base de una cuchara distribuimos el chocolate por toda la base.

Preparamos el relleno.

En un procesador de alimentos trituramos la calabaza, reservamos.

En un bol mediano añadimos el chocolate al caramelo troceado junto con la mantequilla cortada en cubos, colocamos al baño maria, a calor medio-bajo, y dejamos hasta que se fundan. Removeremos de vez en cuando.

Reservamos.

En un bol amplio añadimos el puré de calabaza junto con los huevos, el azúcar moscabado, las especias, la leche evaporada, la sal y la maicena. Batimos con ayudas de unas varillas hasta obtener una mezcla homogénea. Incorporamos el chocolate fundido y mezclamos de nuevo hasta obtener una mezcla homogénea.

Vertemos la mezcla sobre el molde, forrada con la base crujiente de galleta, con cuidado ya que es una mezcla muy líquida. Introducimos en el horno, a media altura, y dejamos durante 60 minutos aproximadamente. Sabremos que está lista porque el relleno cuajará y la zona central del pastel será firme y no tambaleará.

Dejamos enfriar dentro del horno con la puerta entreabierta. Una vez que esté fría, sacamos, cubrimos con papel de aluminio e introducimos en el frigorífico hasta el día siguiente.

Al día siguiente preparamos el crujiente de semillas de calabaza.

Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.

Forramos una bandeja con papel de horno, reservamos. En un cuenco añadimos las semillas de calabaza junto con el sirope de Arce, mezclamos ligeramente.

Disponemos la mezcla en la bandeja y horneamos, a media altura, alrededor de 8-10 minutos. Sacamos y dejamos enfriar por completo.

Nota: Es importante que la parte central de la placa que creamos con la mezcla no se muy gruesa, de lo contrario no secará bien y su textura tras enfriar será más bien chiclosa.

Tarta de calabaza y chocolate al caramelo

Decoramos la tarta de calabaza.

Sacamos la tarta del frío y disponemos por la superficie el mascarpone, os recomiendo que esté a temperatura ambiente, de ese modo podremos disponerla con mayor facilidad y sin dañar la parte superior del pastel (de lo contrario, si el queso está muy frío, tendrá una consistencia muy dura que no nos permitirá extenderlo bien y podremos levantar la superficie de la tarta).

Troceamos el crujiente de semillas, en pedazos más bien grandes, y colocamos sobre el mascarpone. Terminamos disponiendo un poco de sirope de Arce por la superficie y ¡listo!

Ya solo nos queda coger un par de cucharas grandes y disfrutar todo lo que podamos ¡y más!

¡Buen provecho!

CONSERVACIÓN: Podemos conservarla en el frigorífico, bien tapada o en un recipiente hermético, alrededor de 7 días. Si queremos hacerla con antelación os recomiendo no decorarla hasta el momento de servir porque el queso mascarpone pierde ese aspecto de textura cremosa y toma un aspecto más seco. Además que el crujiente de pipas de calabaza perdería su textura debido a que absorbe la humedad de la crema.

Tarta de calabaza y chocolate al caramelo
Tarta de calabaza y chocolate al caramelo
Tarta de calabaza y chocolate al caramelo
Tarta de calabaza y chocolate al caramelo

Molde ondulado de Emile Henry de Claudia & Julia, a pesar de parecer lo contrario es muy fácil de cortar y desmoldar la tarta.

 

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