Okonomiyaki – Tortita japonesa
La receta de hoy me venía rondando hace tiempo y por fin me dispuse a probarla, Okonomiyaki, tortitas japonesas. Este tipo de tortita es un tanto peculiar… primero porque los ingredientes que lleva están bastante lejos de lo primero que se nos pasa por la cabeza al leer “tortita” y segundo porque no es dulce, sino salada.
¿Os sorprenderá? En caso de que no la conozcáis ya, sí, y mucho. Es un plato muy completo, en todos los sentidos, porque lleva gran variedad de ingredientes y os aseguro que no os dejará con hambre…
El Okonomiyaki se suele relacionar con la región de Kansai, donde se cree que fue su lugar de origen en Hiroshima. Es considerado uno de los platos más típicos de Osaka junto con el takoyaki (unas bolitas de pulpo).
Se trata de una elaboración que consiste en una mezcla de varios ingredientes cocinados a la plancha. La palabra okonomiyaki está formada por konomi (que significa “gusto”) y yaki (que significa “cocinado a la plancha”), de modo que su traducción sería “cocinado a la plancha a su gusto”.
Los elementos base, por así decirlo, de esta elaboración serían harina, col, patata japonesa (Nagaimo o Yamaimo), agua y huevo. El resto de ingredientes suelen ser a gusto de quien la va a consumir aunque sí que suelen haber ciertos ingredientes en común como la cebolleta, carne, gambas, verduras, kimchi o jengibre encurtido. Aunque se pueden encontrar gran variedad de preparaciones dependiendo la zona.
Normalmente, según qué restaurante, el cocinero suele prepararla delante del cliente en una plancha o bien son los propios comensales quienes se elaboran su okonomiyaki. Se les proporciona la base de la tortita junto con diferentes tipos de ingredientes para que puedan elaborársela a su propio gusto.
Se presenta con una capa de salsa okonomiyaki (más abajo os dejo cómo hacerla en casa) mayonesa Kewpie (mayonesa japonesa), alga nori, copos de bonitos deshidratado y algún que otro ingrediente opcional o a nuestra elección.
En su preparación encontraremos varios ingredientes un tanto peculiares… pero nada complejos de encontrar, a pesar de parecer lo contrario.
Katsuobushi ¿qué es?
O también conocido como hanakatsuo (más pequeñas) o kezurikatsuo (más grandes y gruesas) es un alimento preparado a partir de atún o bonito de altura seco, fermentado y ahumado. Se puede encontrar en un formato de virutas y envasado en pequeñas bolsas. El katsuobushi es la base junto con el konbu del caldo dashi, base de muchas sopas y salsa, como la sopa de miso o la salsa soba.
Tradicionalmente, era costumbre tener a mano trozos grandes de katsuobushi de los que se sacaban virutas con un instrumento llamado katsuobushi kezuriki conforme se iban necesitando. Este método se deshecho por ser poco práctico.
Su característico sabor umami (del que os hablé hace poco) es debido a su elevado contenido en ácido inosínico, que se da gracias a la hidrólisis y a reacciones químicas a partir de levaduras o de extractos de pescado o carne, o apareciendo de manera natural cuando se dejan curar.
Cuando este ingrediente se añade como condimento a una elaboración caliente, que libere vapor, el efecto que se consigue es que estas virutas se muevan de modo que parece que bailan. Por esa razón se les conoce como “copos de pescado bailarines“.
Caldo dashi ¿qué es y cómo puedo hacerlo?
El caldo dashi es un caldo elaborado a partir de katsuobushi (esto lo acabamos de ver) y alga konbu. Es una base para muchas elaboraciones japonesas desde la famosa sopa miso, guisos, salsa, carnes o la receta que vamos a preparar hoy.
Este caldo podemos encontrarlo en un preparado deshidratado o bien hacerlo en casa, si tenemos ambos ingredientes. Necesitaremos:
- 1/2 litro de agua
- 10 g de alga konbu seca
- 15 g de katsuobushi
Preparación:
- Limpiamos el alga konbu y rehidratamos el alga konbu en agua durante 25 minutos.
- Disponemos el agua en una olla mediana junto con el alga a calor medio. Dejamos hasta que comience a burbujear.
- Sacamos el alga y añadimos los copos de bonito deshidratados. Reducimos un poco el calor y dejamos durante unos 10 minutos. Limpiaremos la superficie de espuma a medida que esta aparezca.
- Retiramos del calor y dejamos reposar hasta que los copos comiencen a hundirse.
- Colamos y reservamos.
La receta la seguí de Japonismo.
Respecto al resto de ingredientes, creo que no tendréis mayor problema en encontrarlos ni reconocerlos.
Existe una salsa llamada okonomiyaki que es específica para este plato y otros similares. Es probable que alguno de vosotros la tengáis en casa ya, fenomenal. De lo contrario no os preocupéis porque os muestro cómo elaborarla también. Seguro que el ingrediente que más os chocará será el ketchup (al menos es el que me sorprendió a mi!)
No me enrollo más y os dejo con el proceso 😉
INGREDIENTES PARA 2 OKONOMIYAKI:
Receta adaptada de Wild Green Sardines y Curious Nut.
PARA LA TORTITA:
- 120 g de harina de trigo
- 35 g de Maizena
- 2 huevos L
- 150 g de caldo dashi o en su defecto agua
- 1/2 cucharadita de soja
- 300 g de col china o repollo normal en su defecto
- 1 cucharada de tenkasu (opcional)
- 6 gambones grandes
- 6 lonchas de bacon troceadas
- 2 ajetes
- jengibre encurtido* al gusto
- 2 cucharadas de aceite de oliva para cocinarlas
* En el enlace veréis cómo hacerlo en casa
PARA LA SALSA OKONOMIYAKI (PARA 2 TORTITAS):
- Salsa Worcestershire 1 y 1/2 cucharada
- Ketchup 1 y 1/2 cucharada
- Salsa Oyster 1 cucharada
- Miel 1 cucharada
- Azúcar moscabado 1 cucharada
- Salsa de soja 1/2 cucharadita
PARA LA MAYONESA:
- 50 g de mayonesa
- 1/2 cucharada de vinagre de arroz
- 1 cucharadita de azúcar blanco granulado
PARA DECORAR:
- Katsuobushi (copos de bonito deshidratado)
- 1-2 ajetes finamente cortados
- copos de algas Nori
- sésamo blanco
ELABORACIÓN:
Preparamos la salsa okonomiyaki.
- En un bol añadimos todos los ingredientes y mezclamos bien hasta homogeneizar.
- Cubrimos con film y reservamos.
Preparamos la mayonesa.
- En un cuenco añadimos todos los ingredientes y mezclamos bien.
- Vertemos la mezcla dentro de una manga pastelera, cerramos con una pinta zip y reservamos en el frigorífico.
Preparamos los okonomiyaki.
- Troceamos finamente y en juliana la col china, reservamos.
- Picamos finamente los ajetes, reservamos.
- Limpiamos los gambones retirando la cabeza y el caparazón exterior. Cortamos en trozos de unos 2 cm y reservamos.
- En un bol añadimos los dos tipos de harina junto con el caldo dashi, la soja y los huevos. Mezclamos con ayuda de unas varillas hasta obtener una mezcla homogénea.
- Añadimos la col troceada junto con los gambones en trozos y los ajetes. Mezclamos bien para distribuir los ingredientes de manera uniforme por toda la mezcla.
Cocinamos las tortitas japonesas.
- Preparamos una sartén antiadherente de 20 cm, o una medida aproximada, vertemos una cucharada de aceite de oliva y colocamos a calor medio alto.
- Una vez que tome temperatura, vertemos la mitad de la mezcla en la sartén, serán unos 400 g aprox.
- Aplanamos ligeramente para darle forma de tortita pero sin presionar en exceso la mezcla. Tan solo tendremos que darle forma aplanada cubriendo toda la superficie de la sartén.
- Mientras que se cocina uno de los lados, disponemos la mitad del bacon por la parte superior de la tortita. Dejaremos alrededor de 4-5 minutos.
- Damos la vuelta a la tortita, lo más sencillo es hacerlo como si de una tortilla de patata se tratase, y dejamos otros 4-5 minutos por el otro lado. Nos quedará un exterior dorado y crujiente con un interior suave y jugoso, que no ¡crudo!
- Sacamos disponiendo el lado del bacon hacia arriba.
- Repetimos con el resto de la mezcla.
Decoramos el okonomiyaki.
- Disponemos una capa de salsa okonomiyaki en la superficie.
- Con ayuda de la manga pastelera, crearemos hilos con la salsa de mayonesa por la superficie.
- Para crear un efecto zig zag, cogeremos un palillo y trazaremos líneas en sentido perpendicular a los hilos de mayonesa (este paso es meramente decorativo y se puede omitir).
- Espolvoreamos un poco de alga Nori, Katsubushi, los ajetes finamente troceados y un poco de sésamo blanco.
- Servimos enseguida.
NOTAS: Os recomiendo espolvorear los copos de algas Nori y los de bonito deshidratados justo antes de servir. La razón es que estos se humedecen rápidamente y pueden perder un poco de presencia.
Sin duda estas tortitas japonesas u okonomiyaki han sido todo un descubrimiento para mi, reconozco que todas estas recetas ¡me chiflan! No solo por el hecho de probar cosas nuevas, que me fascina, sino además por la cantidad de ingredientes nuevos que probamos. Y que pasarán a ser parte de la familia 😉
Además son muy rápidas de hacer, en poco más de 20 minutos podremos disfrutar de un plato con sabores muy peculiares y textura muy agradables.
Animaros con ella y me contáis que os ha parecido 😉
Saludos,
Eva
Fuentes: Wikipedia y Wikipedia (2)
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