Icono del sitio Bake-Street.com

Peach Tarte Tatin

Peach tarte tatin

Los postres frescos, ligeros e individuales me parecen perfectos para terminar  cualquier velada.
Este formato es ideal, ya que al presentarlo tenemos la sensación de disfrutar de un postre hecho especialmente para nosotros.

La Tarte Tatin es uno de mis postres preferidos, aunque he de reconocer que tengo unos cuantos, creo que es uno de los más sencillos y mejor agradecidos que nos vamos a encontrar en repostería.
Para esta ocasión pensé en cambiar ciertos ingredientes de la receta tradicional y hacer una por cada comensal.

Respecto a la fruta elegí el melocotón, tiene una carne firme y puede aguantar una cocción con caramelo, su sabor es dulce pero no demasiado como para hacerlo pesado una vez cocinado.

Para la masa decidí darle un ligero aroma a canela y utilizar azúcar moreno en lugar de azúcar blanco, ya que es más natural y beneficioso al no estar refinado.
Es el mismo tipo de masa que utilice para el pastel de higos asados, miel  y requesón a la canela,  me gustó tanto sus resultados que pensé que le iría muy bien a esta tarta.

Para decorar podemos elegir aquello que más nos guste o simplemente dejarla tal cual está.
En mi caso opté por unas grosellas, ya que al saborear el postre notaríamos un pequeño contrapunto en el paladar, ya que  por si solas tienen un sabor un tanto ácido y al combinar con el dulce se obtiene un buen resultado.

Acerca de la grosella roja sabemos que es pariente de la grosella negra, más dulce que la anterior, las cuales son originarias del norte y este de Europa.
Los primeros cultivos de grosella aparecieron en Bélgica y el norte de Francia en el S. XVII y su uso principal debido a su sabor es para ser cocinada o producir mermeladas.
Se la considera una fruta muy beneficiosa ya que tiene un alto contenido en vitamina C, ácidos frutales y fibra.
Por lo cual pensé, ¿qué mejor acompañante que este?

El resto ya lo conocéis… un proceso sencillo y tradicional por el que obtenemos unos resultados maravillosos.
Espero que os guste esta variedad y sobretodo que disfrutéis de ella!

Saludos,
Mrs Hudson.

INGREDIENTES PARA 4 TARTAS INDIVIDUALES DE 10 CM DE DIÁMETRO POR 5 CM DE ALTO:

PARA EL RELLENO:

PARA LA MASA SABLÉE:

Con esta cantidad tendremos para realizar 8 tartas individuales.

PARA DECORAR:

ELABORACIÓN:

Comenzamos elaborando la masa sablée.

Como os he comentado un poco más arriba, siempre hago mayor cantidad de masa sablée, ya que en muchas ocasiones me salva a la hora de realizar recetas de último momento. Se puede congelar envuelto en film y tarda muy poco tiempo en descongelarse.

Rallamos la mantequilla para poder trabajarla mejor. Una vez lista, añadimos la harina y trabajamos con la yema de los dedos hasta conseguir una textura arenosa.

Añadimos el azúcar moreno, la canela, la sal y las yemas de huevo, unificamos los ingredientes hasta obtener una masa arenosa. 

Añadimos el agua helada y volvemos a trabajar hasta que esta se absorva. Debemos obtener una masa ligeramente compacta, nos queda algo quebradiza.

Si observamos que la masa queda demasiado quebradiza, le añadiremos un poco más de agua para que nos quede más maleable. 

Hacemos un disco, forramos con film e introducimos en el frigorífico durante 1 hora.

Preparamos el relleno.

Pelamos y troceamos el melocotón a gajos, rociamos con unas gotas de zumo de limón para evitar que se oxide. Reservamos.

Preparamos el caramelo. En una sartén antiadherente incorporamos el azúcar y dejamos a calor medio-alto hasta obtener un caramelo dorado pero con mucho cuidado que no se nos queme.

Una vez tengamos el caramelo listo añadimos el chorrito de limón y la mantequilla a cuadraditos,  dejamos hasta que se funda completamente.

Una vez esté fundida la mantequilla, incorporamos el melocotón y dejamos a calor medio durante 20-25 minutos removiendo de vez en cuando. Notaremos que los melocotones soltarán mucho líquido, debemos dejar que este reduzca ligeramente.

Mientras precalentaremos el horno a 180º C con ambas placas.

Transcurrido el tiempo que está en el fuego, retiramos y preparamos los moldes.

Rellenaremos cada uno colocando el melocotón caramelizado, disponemos una pequeña cantidad del caramelo que tenemos en la sartén e introduciremos en el horno durante 15 minutos aproximadamente.

No debemos dejarlo más tiempo en el horno, ya que debemos tener en cuenta que después lo hornearemos 15-20 minutos más con la masa.

Sacamos del horno y dejamos atemperar ligeramente, alrededor de 10 minutos.

Mientras estiramos la masa.

Espolvoreamos con harina abundantemente la superficie sobre la que vamos a trabajar, es una masa que se adhiere mucho a la mesa tras estirarla, por lo que no temáis en excederos con la harina.

Estiramos la masa con ayuda de un rodillo. Para hacer discos del tamaño del molde he utilizado un cortador de galletas, cortamos y colocamos sobre el molde. Remetemos ligeramente y con mucho cuidado la masa hacia el interior.

Cubrimos los laterales con un poco de masa de modo que no quede visible el relleno y se adhiera a las paredes del molde.

Pinchamos la superficie para favorecer la salida de vapor e introducimos en el horno durante 15-20 minutos. Observaremos que la superficie toma un ligero color dorado.

Sacamos y dejamos enfriar durante 5-10 minutos antes de desmoldarla, de ese modo el melocotón absorverá gran parte del caramelo y al voltearla no se derramará nada de este.

No debemos dejar que enfríe en el molde ya que de lo contrario el caramelo al enfriar se quedaría adherido a este.

Con ayuda de un palillo, nos aseguramos que los bordes quedan sueltos y no están adheridos al molde. Colocamos un plato sobre el y volteamos.

Acompañamos de unas grosellas y un poco de crème fraîche y…a disfrutar!!

Otra manera de disfrutar de una maravillosa Tarte Tatin en formato individual, con una fruta de esta época.

Buen provecho!!

Salir de la versión móvil