Buenos días! Tras una buena temporada de descanso volvemos a la carga con mucha energía y sobretodo ilusión.
Hoy es un día especial para mi porque… es mi cumpleaños!
Es increíble como pasan los días y con que velocidad llegan todas las cosas que tenemos en mente. Lo importante de todo es disfrutarlo y poder compartirlo con todas aquellas personas a las que apreciamos.
Para celebrarlo con vosotros he pensado en un postre sencillo y ligero, lejos de las tartas a las que estamos acostumbrados ya que además en verano a no ser que sean heladas parece que apetecen poco…
Por lo que hoy disfrutaremos de una deliciosa galette de frutas con un ligero aroma a azafrán.
La galette tiene su origen en Bretaña, Francia, su término es utilizado en la cocina francesa para designar diferentes masas planas, redondas y crujientes las cuales pueden llevar diferentes rellenos, dulces o salados.
En Francia se denominan Galettes Bretonne a los panqueques elaborados con alforfón, los cuales constan de relleno salado, mientras que los elaborados con harina de trigo y dulces, de menor tamaño, se les denominan crêpes. En la región de Bretaña las galettes también son utilizadas como sustituto del pan, aunque son consumidas en el todo el país.
En esta ocasión la masa es un tipo de “hojaldre áspero”, no conocía esta variedad de masa pero el resultado ha sido muy satisfactorio. Su elaboración es mucho más sencilla que un hojaldre, de hecho me recuerda a la elaboración de una masa sablée.
La receta de esta masa es una adaptación de Kim Boyce.
¿El relleno? melocotón, arándanos y mermelada de moras con un toque de cítricos y azafrán, una delicia!
El azafrán es una especie que deriva de los estigmas de la flor Crocus sativus, caracterizado por su sabor amargo y su aroma.
No es conocido con exactitud el origen de su nombre, pero lo que si consta es que apenas ha sufrido alteraciones en su evolución. Se cree que deriva del latín “Safranum” y que proviene de la palabra árabe “asfar” que significa “amarillo”.
Data del año 2300 a.C. y hay diversas referencias sobre su uso en ritos, ceremonias religiosas, medicina, gastronomía o incluso como tinte.
En la literatura griega y romana se dice que aquellos que disfrutaban de una vida refinada en la antigüedad clásica, teñían el papel para otorgarle color y olor. También teñían sus vestidos de fiesta, rellenaban cojines y esparcían por el suelo hebras de azafrán para celebrar festines.
Es una especia cuyo mercado mundial, tanto en producción como exportación ha estado siempre encabezado por Irán, seguido por otros países como España, Marruecos, India y Grecia.
Se necesitan 250.000 flores de azafrán para lograr un kilogramo de azafrán puro. En 2010 el precio del azafrán es España rondaba los 3000 euros el kilo, lo cual hace ver que es una de las especias más valoradas.
Hace milenios que disfrutamos de sabores sorprendentes que despiertan todos nuestros sentidos y hacen que cada pedazo sea digno de un bocado de dioses, hoy os dejo uno de esas combinaciones que os encantaran. Deseamos que los disfrutéis!!
Saludos,
Mrs Hudson.
INGREDIENTES PARA 1 GALETTE MEDIANA:
PARA LA MASA:
- 68 g de harina de centeno
- 68 g de harina de fuerza
- 1/8 cucharadita de sal (1/8 Tsp)
- 8 g de azúcar granulado
- 90 g de mantequilla sin sal fría cortada en cuadraditos
- 60 g de agua helada
- 1/4 cucharadita de vinagre de manzana (1/4 Tsp)
PARA EL RELLENO:
- 3 melocotones grandes
- 100 g de arándanos
- 4 cucharadas de mermelada de moras (4 Tbsp)
- 3 cucharadas de azúcar granulado
- 1/8 cucharadita de azafrán molido (1/8 Tsp)
- ralladura de 1/2 limón
- pizca de sal
- 1 huevo + 1 cucharada de agua (1 Tbsp) para pintar
- 4 cucharadas de azúcar demerara o grueso para espolvorear
ELABORACIÓN:
Comenzamos elaborando la masa para la galette.
En un bol amplio incorporamos los 2 tipos de harina junto con el azúcar y la sal, mezclamos ligeramente.
Cortamos la mantequilla en cuadraditos e incorporamos al bol. Con ayuda de las amnos, frotamos la mantequilla con la harina hasta obtener una textura similar a unas migas.
En un vaso mezclamos el agua junto con el vinagre de manzana, hacemos un hueco en la mezcla de mantequilla y harina e incorporamos poco a poco el agua mientras mezclamos. Debemos obtener una masa homogénea.
Espolvoreamos ligeramente una superficie con harina y trabajamos la masa durante unos segundos. Damos forma de disco, cubrimos con film e introducimos en el frio durante 2-3 horas.
Transcurrido ese tiempo, sacamos del frío, espolvoreamos con harina una superficie de trabajo y comenzamos a estirar la masa. Debemos formar un rectángulo de 15×25 cm aproximadamente.
Para evitar que la masa se nos adhiera al rodillo, lo frotaremos ligeramente con harina.
Plegaremos la masa en 3 partes, primero el lado inferior hacia el centro y después la parte superior hacia el centro (el mismo plegado que realizamos cuando elaboramos hojaldre).
Giramos la masa 1/4 de vuelta y volvemos a estirar procurando obtener un largo aproximado de 25 cm, plegamos de nuevo y volvemos a girar 1/4 de vuelta.
En total repetiremos este proceso 4 veces.
Cubrimos la masa con film e introducimos en el frio durante un mínimo de 2 horas.
Podemos dejarla preparada la noche anterior.
Preparamos el relleno.
Espolvoreamos con harina una superficie de trabajo, sacamos la masa del frio y dejamos reposar 5 minutos para que sea más fácil trabajarla.
Estiramos con ayuda de un rodillo formando un disco de 38 cm de diámetro aproximadamente.
Es difícil darle forma circular a la masa, por lo que no ha de ser perfecto, ha de tener una forma aproximada.
Colocamos el disco sobre una bandeja forrada con papel de horno e introducimos en el frio mientras preparamos la fruta.
En un tazón incorporamos el azúcar junto con el azafrán, la sal y la ralladura de limón, frotamos con la yema de los dedos para que el azúcar absorva los aromas. Reservamos.
Preparamos la fruta, lavamos y cortamos los melocotones en gajos. Pasamos la fruta por el bol del azúcar y revolvemos suavemente.
Sacamos la masa del frio y pasamos con el papel a una bandeja de horno. Extendemos 4 cucharadas de mermelada y repartimos la fruta uniformemente dejando un borde para poder plegarlo.
Doblamos los bordes hacia el interior cubriendo una pequeña parte del relleno, pintamos con huevo batido con agua por el exterior y entre los pliegues para sellarla bien. Introducimos la galette en el frio para que tome firmeza durante 30-40 minutos.
Precalentamos el horno a 180º C con ambas placas.
Una vez transcurrido ese tiempo, pintamos el exterior con el huevo batido con agua y espolvoreamos con azúcar demerara o azúcar grueso.
Introducimos en el horno durante 35-40 minutos, tomará un ligero color dorado. Observemos que al final de la cocción el jugo que suelta la fruta burbujea.
Sacamos y dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.
Un postre perfecto para estos días tan soleados ya que además de ser ligero nos aporta gran cantidad de vitaminas y una deliciosa combinación de sabores.
Buen provecho!!