Llevaba mucho tiempo sin dejaros alguna receta salada, no por el hecho de que no las haga… Pero cuando voy eligiendo recetas para publicar, siempre voy compartiendo las dulces y dejo acumuladas las saladas. Pero me dije, no, ya es hora de ir sacando estas recetas que no solo son fáciles y resultonas, sino que además, son ideales para alegrarnos la semana. Hoy vamos a ver cómo preparar un Curry verde vegano con arroz jazmín.
Este verano descubrí esta receta gracias a Ania de Lazy Cat Kitchen (muchas gracias por esta maravilla de receta) y no sé la de veces que la he hecho… Había semanas que repetía en bucle la comida de medio día con este curry verde. No sé si os pasa lo mismo a vosotros, pero cuando hago o descubro algo que me gusta mucho, no me importa comerlo todos los días durante varias semanas… Me enganché totalmente.
Preparando el curry verde vegano con arroz jazmín.
La receta que os dejo no es igual que la de Ania, pero sigue una línea similar a la que ella comparte (y está espectacular, os lo digo yo que la he probado varias veces). Una vez que probé la suya, decidí hacer unos cambios a mi gusto con otro tipo de ingredientes.
De hecho, os vais a encontrar algunos que igual os chocan un poco como el caldo Dashi, piparras (sí, piparras, me vuelven loca), shichimi togarashi... En fin, decidí hacer una combinación de sabores algo diferente con algunos ingredientes que me gustan mucho. Esto es algo que me gusta mucho de la cocina, poder dar nuestro toque personal a elaboraciones que han hecho otras personas. En repostería no funciona tan abiertamente, pero también se puede hacer el algunos casos.
Este curry es un plato para aquellos que les guste el picante, porque pica. No a un nivel que no se pueda soportar, pero si no os gustan este tipo de sabores, entonces os recomiendo reducir la cantidad de chile y piparras. O bien omitir alguno de ellos y reducir el otro. De ese modo podréis disfrutarlo y no sufrir, jajaja.
Cocotte Ovalada Evolution de Le Creuset
La paciencia de un proceso.
Ya sabemos que todas aquellas elaboraciones que, una vez las hemos cocinado, si las dejamos reposar durante la noche en el frío mejoran su sabor final. Los sabores se asientan, maduran y al día siguiente son más potentes en nuestro paladar.Es por esa razón que os recomiendo, si podéis y queréis, una vez que esté cocinado el curry y haya enfriado, lo dejéis para comer al día siguiente. Tal vez os cueste un poco, en mi caso con este tipo de platos me cuesta mucho, pero merece la pena. Y si no, os preparáis un cuenquito pequeño y el resto para el día siguiente 😉
Una vez que tengamos esta base preparada, ya solo tendremos que elegir con qué lo vamos a acompañar. En mi caso arroz jazmín (pero podéis utilizar otra variedad si lo deseáis o incluso aromatizarlo como en esta receta), brócoli, edamames, berenjena y brotes.
Las combinaciones para acompañarlo pueden ser muy amplias; podéis usar verduras de temporada como la batata, calabaza, castañas o incluso en verano, utilizar hortalizas crudas como el pepino, hinojo fresco… Todo aquello que os guste, irá perfecto.
Ingredientes para 4 raciones
PARA LA PASTA DE CURRY VERDE:- 3 chalotas, 40 g aprox.
- 4 dientes de ajo, 25 g aprox.
- 45 g de jengibre pelado
- 2 cucharaditas de citronella seca
- 1 cucharadita de cilantro en grano
- 3/4 cucharadita de comino molido
- 15 g de chile verde
- 2 piparras
- 12 g de cilantro fresco, solo las hojas
- 6 g de albahaca fresca, solo las hojas
- shichimi togarashi al gusto
- 1 cucharadita de sal
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 400 g de leche de coco de alto contenido graso
- 480 g de caldo Dashi, receta en este enlace
- 6 hojas de lima kaffir
- 1-2 cucharadas de Tamari
- zumo de 1/2 lima
- ralladura de una lima
- 4 cucharaditas de azúcar (se puede usar azúcar de coco)
- arroz jazmín
- 1 berenjena grande
- 200 g de edamame, en mi caso son congelados
- ramilletes de brócoli
- brotes al gusto, en mi caso he utilizado brotes de soja
Elaboración
Preparamos la pasta de curry.
- En un procesador de alimentos añadimos todos los ingredientes para la pasta de curry verde a excepción del cilantro y la albahaca.
- Procesamos hasta que estén cortados muy finos.
- Añadimos el cilantro y la albahaca, volvemos a procesar hasta que se integren. Procurad no exceder el tiempo de procesado a la hora picar los ingredientes cuando hayamos integrado las aromáticas. De lo contrario con el calor de las cuchillas y el exceso de fricción, se oscurecerán.
- Reservamos.
Preparamos el caldo de curry.
- Colocamos una cocotte u olla grande a calor medio bajo y vertemos el aceite de oliva.
- Una vez que tenga un poco de temperatura, incorporamos la pasta de curry. Cocinamos durante 10 minutos a calor medio bajo removiendo constantemente.
- Vertemos la leche de coco y mezclamos con la pasta de curry verde.
- Añadimos las hojas de lima kaffir junto con el caldo Dashi.
- Subimos un poco el calor hasta que alcance una suave ebullición, en ese momento reducimos el calor y cocinamos a calor suave durante 15 minutos.
- Añadimos el Tamari, zumo de 1/2 lima, el azúcar y la ralladura de lima. Removemos.
- Retiramos del calor y dejamos que enfríe por completo.
- Una vez que haya enfriado, refrigeramos durante toda la noche para que los sabores maduren y se potencien.
Cocinamos las verduras.
- Puesto que cada verdura requiere un proceso y tiempo de cocción diferente, prepararemos estas por separado.
Cocinamos la berenjena.
- Lavamos y secamos la berenjena. Cortamos por la mitad longitudinalmente, sin retirar la piel exterior, y estas en cuadrados de 2 cm aproximadamente.
- Preparamos una sartén de hierro grande, o una antiadherente si lo preferís, vertemos 3-4 cucharadas de aceite de oliva y colocamos a calor medio alto.
- Una vez que tome temperatura, añadimos la berenjena y cocinamos hasta que esta se ablande y adquiera un color dorado en el exterior.
- Salpimentamos al gusto, mezclamos y colocamos en un colador para retirar el exceso de aceite, alrededor de 15 minutos.
Blanqueamos el brócoli.
- Preparamos un cazo con agua y colocamos a fuego medio alto, dejamos que llegue a ebullición. Mientras cortamos pequeños tallos de brócoli y lavamos muy bien.
- Preparamos un bol con agua muy fría y hielo, reservamos.
- Una vez que el agua llegue a ebullición, añadimos la sal e incorporamos el brócoli. Cocinamos durante 2 minutos, no debemos exceder este tiempo.
- Sacamos con ayuda de una espumadera e introducimos rápidamente en el bol con agua y hielo. Dejamos durante 1 minuto. Escurrimos y reservamos.
- Con este proceso favorecemos que el brócoli adquiera una textura muy crujiente además de sacar toda la clorofila y favorecer que tenga un color verde muy intenso.
Cocinamos los edamames.
- Preparamos un cazo con agua, la cantidad irá acorde a los edamames que vayáis a cocinar, y colocamos a calor alto. Dejamos que el agua llegue a ebullición.
- Añadimos los edamames, en mi caso congelados, y dejamos que el agua llegue de nuevo a ebullición.
- Una vez que el agua rompa a hervir, cocinaremos durante 3-4 minutos.
- Retiramos del calor y vertemos sobre un colador.
- Reservamos.
Cocinamos el arroz jazmín.
- En una olla ponemos a hervir la cantidad de agua que vayamos a necesitar acorde a la cantidad de arroz que vayáis a cocinar.
- Lavamos el arroz muy bien con agua fría el arroz para retirar el exceso de almidón. Escurrimos.
- Añadimos el arroz en el agua caliente y dejamos a fuego medio alto hasta que rompa a hervir.
- Una vez que rompa a hervir, bajamos a calor medio, tapamos y cocinamos durante 5 minutos.
- Transcurrido este tiempo, reducimos a calor medio bajo y cocinamos durante 8-10 minutos. Deberá haber absorbido todo el agua. Es importante no destapar la olla durante el tiempo de cocción.
- Apartamos del calor y dejamos reposar 2 minutos.
Servimos.
- Repartimos el arroz en boles o platos individuales.
- Servimos con el caldo de curry, las verduras, edamames, brotes de soja, rodajas de lima, hojas de albahaca y cilantro.
- Servimos enseguida.
Notas
- Si hay algún ingrediente que no encontráis, podéis sustituirlo por otro similar o bien omitirlo. Lo bueno de este tipo de recetas es que siempre pueden ajustarse a los gustos y/o necesidades de cada uno.
- En mi caso he utilizado caldo Dashi, pero podéis usar caldo de verduras, otro tipo de caldo o incluso agua si lo preferís. En este último caso tened en cuenta que el sabor será un poco inferior.
- Si no os gusta le leche de coco podéis utilizar otra variedad de leche vegetal o incluso animal. Pero el sabor, consistencia y cremosidad, no será igual...
- Si hacéis caldo de curry para varios días, se puede mantener refrigerado durante 2-3 días o bien congelarlo.
- Las verduras son totalmente facultativas y podéis ajustarla a vuestros gustos. A mi me vuelve loca la berenjena y los edamames... de modo que tenía que utilizarlos sí o sí, jajaja. Por no hablar de los brotes, aportan una textura crujiente maravillosa.
- Os recomiendo hacer las verduras justo en el mismo momento que las vayáis a consumir.
- En mi caso he utilizado arroz jazmín, pero podéis utilizar aquella variedad de arroz que prefiráis. Para cocinarlo, seguid siempre las indicaciones del envase o fabricante.