Hacía mucho tiempo que quería compartir con vosotros cómo hacer Pan de Pita en casa. Seguro que a vosotros os pasa lo mismo que a mí. Es un tipo de pan que consumís mucho en casa, pero por falta de tiempo, muchas veces lo termináis comprando… Si os soy sincera, no es una elaboración que requiere mucho tiempo o que sea muy complicado de llevar a cabo, todo lo contrario. Es una variedad de pan súper sencilla de preparar, solo que necesita que hagamos un buen proceso de amasado.
Los tiempos de levado son bastante cortos si lo comparamos con un pan de masa madre, pero mucho más aún en este momento del año que tenemos una temperatura bastante buena para levar masas. Vamos, que no os dejo opción para decirme que no los vais a preparar este fin de semana, jajaja.
Origen del Pan de Pita.
El pan de pita, también conocido como pan árabe, pan sirio y pan libanés, ha existido aproximadamente desde el año 2500 AC.
Las excavaciones de las antiguas ciudades egipcias muestran que cultivaban trigo y cebada, y estos cereales se usaban para hornear panes planos. Se cree que los egipcios descubrieron el pan leudado de manera accidental, dejando una masa olvidada en un lugar cálido. Esto dio lugar a un prefermento natural.
Antes de que se desarrollara un proceso para hacer levadura, los panaderos solían apartar un trozo de masa sin hornear de cada lote. Esa porción de masa reservada había fermentado. En el momento en que se hacía la siguiente remesa de pan se añadía y mezclaba con masa fresca para hacerla crecer.
En el año 1665, un panadero emprendedor pensó en añadir levadura de cerveza a su masa reservada de otro lote.
Al principio, el grano se molía manualmente frotándolo entre dos piedras. Más tarde se inventó un proceso mecánico en el que una piedra de tracción tirada por ganado giraba sobre una piedra estacionaria más baja y perpendicular. Con el tiempo, el ganado fue reemplazado por molinos de agua o molinos de viento.
A finales del siglo XVIII, un molinero suizo inventó un mecanismo de rodillos de acero que simplificaba enormemente el proceso de molienda de la harina.
Se cree que pudieron ser los beduinos los primeros en hacer pan de pita.
Es difícil saber con certeza su origen, pero arqueólogos han determinado que fue hecho por primera vez por grupos de personas del oeste del Mediterráneo, muy probablemente por los beduinos o amoritas. Colocaban los panes en el fondo de la vasija de mezclado y se cocinaban a fuego abierto. Este pan se utilizaba como utensilio, así como para la comida.
A medida que los beduinos viajaban por desiertos árabes y saharianos, el pan pita se fue extendiendo y dándose a conocer entre el resto de personas.
En el Medio Oriente aún se hornea el pan de pita en una estufa de patio tradicional, a diferencia de los métodos de cocción que utilizamos hoy en día. Algunas comunidades árabes e israelíes tienen hornos o panaderías comunitarias en las que se reservan horas para que las familias puedan cocer sus panes caseros.
Esta variedad de pan debe hornearse a una temperatura elevada (232-246 °C), para favorecer que el agua de la masa se transforme en vapor, de modo que el pan se hinche creando un hueco en su interior. Al sacarlo del horno, las capas de masa de pan permanecen separadas, lo que permite que el pan se pueda abrir para rellenarlo.
Esta variedad de pan se ha mantenido con el paso del tiempo y se sigue disfrutando como un alimento básico en muchos países del mundo.
Cuando los inmigrantes de Oriente Medio comenzaron a trasladarse a los Estados Unidos, introdujeron a los estadounidenses en su cocina. El pan pita se convirtió en una opción de pan muy popular, especialmente por la ausencia de manteca y las pequeñas cantidades de azúcar añadido. En la década de 1990, el mercado mayorista de pan pita se acercaba a los 80 millones de dólares en ventas anuales. Las pitas comerciales suelen elaborarse con harina de todo uso o harina de trigo integral. Su tamaño oscila entre los 10, 16 y 25,4 cm de diámetro.
Haciendo y disfrutando pan de pita en casa.
Cómo podréis ver en el vídeo, este tipo de pan no tiene mayor complicación. Es súper sencillo de llevar a cabo. Yo os muestro cómo hacer todo el proceso a mano, pero en caso de que queráis usar la amasadora, podéis hacerlo. Seguramente tengáis que ayudar de vez en cuando a la masa con un poco de trabajo a mano, dado que tiene una hidratación bastante moderada.
Esta variedad de pan se puede disfrutar de muchas maneras, ya sea para hacer kebab casero, con hummus (en el blog tengo varias recetas que os van a encantar), baba ganoush, falafel o cremas tipo dip como este de pimientos asados y almendras, zanahoria y garbanzo, tirokafteri… Aunque dentro de poco os voy a dejar una receta para utilizarlos que os va a encantar.
Receta Pan de Pita
Receta adaptada del libro Advanced Bread and Pastry Ingredientes para 9-10 unidades- 265 g de harina Multicereali, W=290
- 235 g de harina de fuerza, W=200
- 315 g de agua
- 4 g de levadura seca
- 2 g de azúcar
- 17 g de aceite de oliva
- 11 g de sal
Elaboración
Preparamos la masa del pan de pita.
- En un bol añadimos los dos tipos de harina junto con el agua, la levadura seca y el azúcar. Mezclamos con ayuda de una espátula para amalgamar los ingredientes.
- Añadimos la sal y mezclamos de nuevo.
- Volcamos la masa sobre una superficie de trabajo limpia y comenzamos a amasar. Combinaremos amasados con reposos hasta lograr un buen desarrollo del gluten.
- Incorporamos el aceite, lo haremos por tandas para facilitar que se integre bien en la masa. No añadiremos más hasta que se haya incorporado por completo.
- Recordad hacer reposos para facilitaros el proceso de amasado.
- Una vez que tengamos una masa lisa y completamente desarrollada, boleamos con suavidad.
- Engrasamos un recipiente hermético o un bol de cristal e introducimos la masa dentro. Tapamos y dejamos levar hasta que doble su volumen. En mi caso fueron 2 y 1/2 horas a 25-27ºC, la temperatura fue aumentando conforme pasaba el tiempo.
Preformamos el pan de pita.
- Volcamos la masa sobre una superficie de trabajo limpia, dividimos la masa en porciones de 80-85 g cada una, aproximadamente. En mi caso salieron 10 unidades de 82 g.
- Preformamos, cubrimos con film y dejamos reposar durante 20 minutos.
Formamos el pan de pita.
- Precalentamos el horno a 260ºC, en mi caso cocí el pan sobre la plancha de acero. De modo que precalenté el horno con ella dentro en la parte más baja del horno.
- Espolvoreamos la superficie de trabajo con harina, aplanamos ligeramente con la palma de la mano y procedemos a estirar con un rodillo. En mi caso les dí un diámetro de 15-17 cm, pero podéis hacerlo de menor tamaño si lo deseáis.
- Colocamos sobre una bandeja forrada con papel de horno y estiramos otra pieza.
- En mi caso coloqué dos panes de pita por bandeja, de modo que me resultase más cómodo pasarlas al horno. Una vez que las coloquemos en la bandeja, tapamos con film y dejamos reposar durante 10 minutos.
Cocemos el pan de pita.
- Introducimos el pan en el horno, con ayuda de la bandeja, y horneamos durante 3-4 minutos.
- Los panes suflarán durante el primer minuto de cocción, el tiempo restante dejaremos que el pan esté dentro para llevar a cabo su cocción de manera correcta.
- El pan no debe quedar dorado, sino blanco, porque no queremos que tenga una textura crujiente, sino tierna y blandita. Pero cocida.
- Sacamos del horno, colocamos sobre una tabla de madera y tapamos con un paño de algodón para que conserve su humedad y calor. Podemos incluso apilar los panes si lo deseamos.
- Repetimos el mismo proceso con el resto de panes.
- Servimos enseguida.
Notas para hacer pan de pita
- En mi caso he usado dos tipos de harina de fuerza porque quería aportar el sabor y aroma de la harina multicereales. Puede hacerse sin problemas solo con una variedad de harina de fuerza. Es importante tener en cuenta su fuerza o capacidad de absorción para reducir la hidratación final. Si usáis una harina de fuerza W=200, por ejemplo, tendréis que reducir la cantidad de agua a unos 300 g, más o menos. No añadáis toda de golpe para poder ir observando su consistencia.
- Es importante obtener un buen desarrollo del gluten para lograr buenos resultados. Combinad amasado con reposos, de modo que todo el proceso se haga mucho más llevadero. El proceso completo de amasado, con reposos, puede rondar los 45 minutos.
- Siempre que hagáis un reposo, tapad la masa con el propio bol o film para evitar que la superficie se reseque o encostre.
- El diámetro de los panes de pita, condicionarán la cantidad de miga y grosor del pan. En mi caso prefieren el pan de pita fino, por esa razón les doy mayor diámetro. Si queréis que tengan más miga y sean algo más gruesos, estirar menos cada pieza.
- El tiempo de cocción también estará condicionado por el diámetro de los panes. Cuanto mayor diámetro tengan, menor será el tiempo de cocción. Y viceversa. Mis panes estaban listo en 3-4 minutos, pero si les damos más grosor, necesitarán unos 6-7 minutos de cocción.
- Si nos sobra pan de pita, una vez que haya enfriado, podemos guardarlo dentro de una bolsa tipo zip. Nos aguantará bien durante 1-2 días, aunque idealmente es mejor consumirlo el mismo día de su elaboración.
- Una vez que hayan enfriado, antes de consumirlo, podemos darle un golpe de calor en el tostador para que adquiera una textura muy tierna. Pero, si no lo consumimos enseguida, endurecerá rápido.
