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Macchiato waffles

No sé si sabréis que hoy es el #diadelgofre, la verdad que yo no tenía ni idea hasta que ayer Carmen de Rezetas de Carmen, me lo comentó y me invitó a participar.
Claro, ¿como iba a decir que no a algo así? Con lo que me gustan los gofres y además la oportunidad de aportar recetas a los “días de”.
Por lo que ayer por la tarde me puse a trastear en la cocina y probé varias ideas que se me ocurrieron. Sin duda gano esta, Macchiato waffles.

Si os gusta el café y el chocolate, este es vuestro gofre ideal, os doy mi palabra. La masa más esponjosa que las que he realizado anteriormente. Al saborear, percibimos el sabor del chocolate acompañado de un suave aroma a café…y ya no digo nada del acompañamiento. Habla por si solo, ¡una auténtica maravilla!

Así que hoy os traigo esta riquísima receta de gofres y con ella doy mi pequeña aportación para el #diadelgofre.

Espero que os guste y os animéis con ella, ya que es sencilla y poco laboriosa, obteniendo como resultado una merienda o desayuno delicioso.

¡Os deseo un feliz día!

Saludos,
Mrs Hudson.

 

INGREDIENTES PARA 10-12 GOFRES MEDIANOS:

PARA LA MASA:

PARA EL CARAMELO SALADO:

PARA DECORAR:

Utilizaremos la cantidad de nata que deseemos, con 100 ml tenemos para 4 “copetes” como vemos en las fotografías. Añado 10 gr menos de la mitad de azúcar, para 100 gr de nata utilizo 40 gr de azúcar.

Así podréis calcular según los gofres que vayáis a realizar.

ELABORACIÓN:

Preparamos la masa de los gofres.

Preparamos el café y dejamos templar.

En un cuenco pequeño incorporamos el café recién hecho (templado) junto con el azúcar moreno y la levadura instantánea, dejamos reposar 5 minutos.

En el bol de la Kitchen Aid o bien en un bol amplio si vamos a realizarlo a mano, incorporamos la harina junto con la sal. Mezclamos ligeramente para dispersar un poco la sal.

Realizamos un hueco en el centro e incorporamos la mezcla de café. Añadimos el cacao en polvo y el café en polvo y mezclamos a la velocidad más baja con ayuda de la pala durante 1 minuto.

Si lo realizamos a mano, comenzaremos mezclando con ayuda de una espátula y posteriormente nos ayudaremos de unas varillas eléctricas.

Incorporamos los huevos de uno en uno y mezclando bien tras cada adición para que se integren completamente con la masa.

Añadimos la esencia de vainilla junto con la mantequilla y volvemos a mezclar comenzando por la velocidad más baja aumentando gradualmente hasta una velocidad intermedia.

Pasamos la mezcla a un bol y cubrimos con film, dejamos reposar durante 2 horas aproximadamente.

Mientras elaboramos el caramelo salado.

Personalmente me gusta mucho más el caramelo salado ya que para mi realza el sabor, pero si no nos gusta podemos omitir la sal y realizar un caramelo normal.

En un cazo incorporamos el azúcar y lo ponemos a fuego medio sin dejar de remover. Tenemos que tener cuidado de no sobrepasar el tiempo ya que si no el caramelo nos amargará.

Cuando obtengamos un color dorado incorporamos la nata, la mantequilla y la sal. Tened cuidado ya que el cambio de temperatura genera vapor que puede quemaros.

Bajamos a fuego bajo.

Observaremos que se hace una especie de bola dura, no dejamos de remover hasta disolver completamente todos los ingredientes y que estos estén unificados sin grumos.

Dejaremos a fuego bajo y removiendo hasta que espese ligeramente.

Recordad que una vez que enfrie este tomará mucho más cuerpo.

Pasamos a un frasco de cristal y dejamos enfriar sin tapar.

Una vez transcurrido el tiempo de reposo de la masa procederemos a preparar los gofres.

Prepararemos nuestra gofrera. Una haya alcanzado la temperatura, colocaremos una cucharada en cada lado.

Yo he realizado gofres medianos, si queréis que sean más grandes solo tenéis que poner mayor cantidad.

Cerramos y dejamos al calor alrededor de 4 minutos.

Cada gofrera es diferente por lo que tendréis que seguir las indicaciones del fabricante o mucho mejor vuestra propia experiencia con ella.

En mi caso pongo el termostato de calor en 2,5 y dejo entre 4- 5 minutos, pero debemos controlarlos para que no se nos quemen.

Una vez tengamos listos nuestros gofres montaremos la nata.

En un bol (preferiblemente enfriado en el frigorífico ya que monta mucho mejor) incorporamos la nata líquida para montar y comenzamos a batir con varillas. Cuando veamos que va montando la nata comenzamos a añadir poco a poco el azúcar.

Una vez incorporado todo, batimos hasta obtener una nata firme.

Cuidado de no sobrebatir ya que se nos licuaría.

Introducimos en una manga pastelera y procedemos a montar nuestros gofres.

Decoramos con nata y un ligero hilo de caramelo salado, espolvoreamos con un poco de cacao en polvo y… ¡a disfrutar!

Si os gusta el café y los gofres, esta es vuestra merienda perfecta.

¡Buen provecho!

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