No es la primera vez que me pasa y adoro siempre que ocurre. Muchas veces, estoy navegando por internet buscando nuevas recetas, inspiración, elaboraciones diferentes… Y me encuentro cosas que jamás había visto antes. Es algo que me ha pasado con muchas recetas del blog y, de hecho, lo he comentado en el propio post. Ha ocurrido de nuevo. Me encontré con esta maravilla de la gastronomía turca, Kalburabasti. Una variedad de galleta rellena con nueces picadas y cubiertas con almíbar y pistachos.
Es algo que me fascina. A lo mejor estoy buscando un relleno para una elaboración salada y buscando, buscando, llego a webs o perfiles de redes sociales en los que muestran maravillas como las que hoy os traigo. Al final dejo a un lado lo que tenía en mente, para otro momento, y me pongo de lleno con lo que he encontrado. Quedé totalmente enamorada con ellas.
Origen del Kalburabasti.
Los Kalburabasti o Kalbura-Basti también conocidos como Hurma, son pequeños pasteles turcos rellenos de nuez molida, con un aspecto texturizado y empapados en almíbar. Es una de las especialidades favoritas que se preparan para “la fiesta de la ruptura del ayuno” “Şeker Bayram o Eid Ul-Fitr” que sigue al mes sagrado del Ramadán.
Su origen es otomano aunque existe una variación muy similar llamada “Hurmašice” o “Hurme” que puede encontrarse en Serbia, Bosnia y Herzegovina. Esto es debido a que los turcos invadieron, controlaron y fueron muy influyentes en esas regiones.
Bandeja perforada Buyer de Claudia & Julia
Elaborando las galletas.
La manera de llevar a cabo estas galletas es un tanto peculiar. Para lograr la textura exterior se suele utilizar un colador, tamiz o rallador que le dará ese acabado final. De hecho “kalbur” significa “colador”. En mi caso veréis que he utilizado otro método para darles el acabado exterior.
Mi primera intención, fue buena. Cogí varios coladores que tenía en casa e intenté texturizar la masa con todos ellos… El dibujo era muy pequeño y sutil. Para mi gusto era demasiado leve, de modo que decidí dibujar las líneas con un cuchillo. Sé que así se rompe toda la magia, pero yo quería que tuvieran un aspecto más marcado 😉
Al parecer, este tipo de dulce es bastante complicado encontrarlo en panaderías, pastelerías o restaurantes en Turquía. Suele ser habitual elaborar este dulce en casa y disfrutarlo con la familia.
Tradicionalmente se rellenan de nueces picadas aunque también se pueden encontrar con un relleno de nueces y coco rallado o incluso sin nada.
He adaptado la receta de la página Yemek.
Ingredientes para 20 unidades
PARA LA MASA:- 235 g de harina floja de repostería
- 35 g de sémola
- 60 g de leche entera
- 100 g de mantequilla sin sal
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1/2 cucharada de azúcar
- 8 g de levadura química tipo Royal
- 1/4 cucharadita de sal
- 40 g de nueces majadas
- 425 g de agua
- 365 g de azúcar
- 2 rodajas de limón
- Pistachos molidos
Elaboración
Preparamos la masa.
- En un cazo añadimos la mantequilla y colocamos a calor medio. Dejamos que se funda por completo.
- Retiramos del calor y añadimos el aceite junto con la leche. Mezclamos.
- En un bol tamizamos la harina y añadimos la sémola, el azúcar, la sal y la levadura química. Mezclamos.
- Vertemos la mezcla de mantequilla sobre la harina e integramos con ayuda de una espátula.
- Una vez que tengamos una masa compacta, volcamos sobre una superficie de trabajo limpia y amasamos hasta homogeneizar por completo. Debemos obtener una masa suave al tacto y modelable.
- Boleamos, introducimos en un bol y cubrimos con film. Dejamos reposar hasta que la masa pierda el calor por completo.
Preparamos el almíbar.
- En un cazo añadimos el agua junto con el azúcar.
- Colocamos a calor medio y dejamos que llegue a ebullición. en ese momento reducimos el calor un poco y dejamos durante 20-25 minutos. Obtendremos un almíbar no muy denso.
- Añadimos las rodajas de limón y dejamos reposar hasta que enfríe por completo.
Formamos las galletas.
- Dividimos la masa en 20 piezas iguales, alrededor de 23 g/cada una. Boleamos.
- Cogemos una de las piezas y aplanamos suavemente procurando dar forma ovalada.
- Rellenamos con nuez molida y unimos los pliegues de los extremos para sellarlos. Modelamos ligeramente para darle forma ovalada.
- Con ayuda de un cuchillo, formamos un patrón enrejado en la superficie.
- Colocamos sobre una bandeja forrada con papel de horno.
- Repetimos el proceso con el resto de piezas.
Horneamos.
- Precalentamos el horno a 175ºC con calor arriba y abajo.
- Horneamos a media altura durante 23-25 minutos. tomarán un ligero color dorado.
- Sacamos del horno y colocamos la bandeja sobre una rejilla.
- Pincelamos cada pieza con el almíbar y dejamos que enfríen durante 30 minutos.
- Colocamos los kalburabasti dentro de una fuente y vertemos el almíbar sobre ellas. Dejamos reposar dentro del almíbar durante 2-3 horas.
Servimos.
- Sacamos los dulces del almíbar y escurrimos ligeramente.
- Colocamos en una fuente o plato donde lo vayamos a servir y espolvoreamos con pistachos molidos.
- Servimos.
Notas
- La masa de las galletas no debemos amasarla durante mucho tiempo, lo suficiente para que los ingredientes se amalgamen y obtengamos una textura suave y lisa.
- Para texturizar la superficie podéis usar el utensilio que prefiráis.
- El relleno original y tradicional es de nueces o, en algunos casos, nueces y coco rallado. Pero si queréis variar el fruto seco, hacedlo sin problemas.
- Os recomiendo no omitir el tiempo de reposo de los dulces en el almíbar. Absorben gran cantidad y el resultado es increíble.
- Se pueden conservar en un recipiente hermético durante varios días.
