Que vamos por casi la mitad del verano y aún no había subido ¡ni una sola receta de helados! La verdad que no es porque no los hagamos en casa, pero muchos de ellos no llegan a la sesión fotográfica, otros se los llevan del congelador “misteriosamente” y otros no consigo sacar tiempo para fotografiarlos sin que me vayan persiguiendo por toda la casa para saber si ya se lo pueden comer… y claro, me termino rindiendo.
Pero dije que de esta tarrina ¡no pasaba! Así que la escondí, muy bien escondida en el congelador y no dije nada de él hasta poder pasar por la sesión de fotos. De modo que mi tardío estreno de este año con helados lo hago con este helado de palomitas con caramelo salado.
Otra cosa que llevaba tiempo queriendo hacer eran las palomitas de caramelo. Recuerdo que cuando éramos pequeñas mi madre (por cierto, se llama Carmen y le mando otro besazo inmensísimo!!! digo otro porque esta mañana ya se lo he mandado cuando he hablado con ella 😀 ) nos las hacía a veces, y nos poníamos súper contentas. Siempre le he preguntado como las hacía y la verdad que no terminaba de decírmelo… se lía a contarme cosas y se me va por los cerros de Úbeda. El caso es que por fin he encontrado como hacerlas y sé de un pequeñajo que está ¡la mar de contento con ello! Menos mal que hice bastantes porque cuando las saque del horno no hacía más que ir a la cocina, supuestamente a por agua, y se venía con un puñado de ellas y una sonrisilla que decía “pero si hay muchas!”…
El proceso es algo más laborioso de lo que imaginaba, todos pensamos en bañarlas en caramelo y listo. En absoluto es difícil o complicado, el proceso se asemeja bastante a un toffee con el que después las bañamos, mezclamos bien y horneamos a temperatura suave.
¿Por qué se hornean? Para darles ese toque crujiente en el exterior.
Veréis que os especifico en los ingredientes granos de maíz, quizás os preguntéis ¿no puedo usar las de bolsa de microondas? Como poder, podéis, pero sí que es cierto que son más blanditas, menos resistentes y al echarle el caramelo se pueden deshacer algunas de ellas.
En la elaboración del helado debemos añadir azúcar invertido, os dejo como hacerlo, o bien algún azúcar que sea considerado como este; miel, Golden Syrup, jarabe de arce… el motivo es para evitar la cristalización del helado. La textura debe quedar suave, cremosa y no con pedacitos pequeños de hielo.
El resultado es un helado realmente cremoso, suave, rico, adictivo y del que puedo decíos que lo hice antes de ayer, hasta ayer no dije que estaba en casa y, hoy, apenas quedan unas cucharadillas… Os recomiendo que lo probéis sin lugar a dudas 😉
Saludos,
Mrs Hudson.
INGREDIENTES:
La receta del helado es una adaptación de Have a Yummy day.
La receta de las palomitas de caramelo son de Food and Cook.
PARA EL HELADO:
- 415 g de leche entera
- 200 g de nata líquida para montar
- 6 yemas de huevo L
- 2 cucharadas soperas de azúcar invertido*
- 170 g de azúcar blanco
- 1 cucharadita de vainilla en pasta
* Pinchando sobre el enlace iréis a la elaboración. Podemos sustituirlo por Golden syrup o miel
PARA EL CARAMELO SALADO:
- 100 g de azúcar blanco
- 150 g de nata líquida para montar a temperatura ambiente
- 20 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 1/4 cucharada de sal
PARA LAS PALOMITAS CON CARAMELO SALADO:
- 110 g de granos de maíz + 1 cucharada de aceite de oliva
- 112 g de mantequilla sin sal
- 170 g de azúcar moscabado claro
- 80 g de Corn syrup o Golden syrup
- 1 cucharadita de vainilla
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/4 cucharadita de bicarbonato sódico
ELABORACIÓN:
Comenzamos preparando el helado.
En una olla amplia añadimos la leche junto con la nata líquida, el azúcar, la vainilla y el azúcar invertido. Colocamos a fuego medio-alto y dejamos hasta que llegue a ebullición.
Mientras en un bol mediano batimos las 6 yemas de huevo, no debemos montarlas tan solo batirlas para incorporar algo de aire. Las claras las podemos guardar en un frasco de cristal en el frigorífico y reservarlas para hacer macarons, merengues, angel food cake… 😉
Una vez que rompa a hervir dejaremos en el calor durante 3 minutos. Vertemos a través de un colador parte de la mezcla de leche sobre las yemas, batimos bien y con rapidez. Pasamos la mezcla de las yemas, a través de un colador nuevamente para evitar que se cuele algún posible trozo de yema cuajada, a la olla y colocamos de nuevo a fuego medio.
Dejaremos al calor sin dejar de remover con ayuda de unas varillas hasta que notemos que toma una consistencia ligeramente más espesa. No debemos dejar que llegue a hervir, tan solo darle calor hasta que espese.
Retiramos del calor, pasamos a un bol amplio y dejaremos que enfríe. Una vez que esté frío, introducimos en el frigorífico durante un mínimo de 4 horas.
Preparamos el caramelo salado.
En un cazo añadimos el azúcar y lo ponemos a fuego medio sin dejar de remover. Tenemos que tener cuidado de no sobrepasar el tiempo expuesto al calor, de lo contrario el caramelo nos amargará.
Cuando obtengamos un color dorado incorporamos la nata, la mantequilla y la sal.
Tened cuidado ya que el cambio de temperatura de la nata y la mantequilla si no están a temperatura ambiente genera vapor que puede quemaros.
Reducimos a fuego bajo sin dejar de remover hasta disolver completamente todos los ingredientes, deberemos obtener una mezcla homogénea y sin grumos.
Pasamos a un frasco de cristal, dejamos enfriar a temperatura ambiente y sin cerrar.
Preparamos la heladera.
Colocamos el cabezal y lo ajustamos hasta centrarlo.
Colocamos el bol de hacer helados, previamente congelado, en la KA y su pala en el interior. Lo ideal es añadir gradualmente la mezcla en la heladera, mientras esta se encuentra girando. Por lo que por fin he utilizado el accesorio que cubre el bol específico para el vertido de líquidos.
Pensé que no lo utilizaría nunca, pero está comprobado que jamás debemos decir nunca. Ha sido muy práctico y limpio para ir vertiéndolo mientras giraba la pala.
Dejamos girando a la velocidad más baja durante 20 minutos aproximadamente.
Pasamos la mezcla a un recipiente, en el que lo vayamos a congelar, si no es hermético lo cubriremos con film, vertemos parte del caramelo salado (o si lo deseamos, todo), removemos ligeramente para formar surcos, tapamos y guardamos en el congelador durante un mínimo de 4 horas, aunque es mejor de un día para otro.
Preparamos las palomitas de caramelo salado.
Precalentamos el horno a 120ºC con calor arriba y abajo. Preparamos una bandeja de horno y forramos con papel de hornear, reservamos.
En una olla amplia vertemos el aceite y dejamos a calor medio hasta que esté caliente. En ese momento añadimos los granos de maíz y tapamos. Una vez que escuchemos los granos de maíz explotar, removeremos de vez en cuando sin quitar la tapadera, para favorecer que exploten la mayor cantidad de granos posibles.
Una vez que escuchemos que se reduce el número de explosiones, retiramos la olla del calor y volcamos las palomitas en un bol amplio. Procuraremos retirar los posibles granos que no han estallado al calor.Reservamos.
Preparamos el caramelo para las palomitas.
En un cazo pequeño añadimos la mantequilla, junto con el azúcar, el Corn syrup o Golden syrup y la vainilla. Colocamos a calor medio alto y dejamos, sin dejar de remover, hasta que se funda por completo. Una vez que rompa a hervir dejamos alrededor de 4-5 minutos sin dejar de remover en ningún momento.
Retiramos del calor y añadimos la sal junto con el bicarbonato, mezclamos con ayuda de una cuchara con energía hasta integrarlo por completo. Observaréis que la mezcla se palidece ligeramente, no os preocupéis, es a causa de una reacción provocada por el bicarbonato.
Vertemos el caramelo, en dos o tres tandas, sobre las palomitas. Deberemos mezclar bien con ayuda de dos cucharas cada vez que vertamos parte de la mezcla de caramelo.
Repartimos las palomitas sobre la bandeja de horno y horneamos a media altura alrededor de 1 hora. Deberemos moverlas cada 15-20 minutos para evitar que se doren demasiado o se quemen.
Sacamos del horno y dejamos enfriar completamente antes de guardar en una bolsa de zip o un recipiente hermético.
Y… ¡llegó el momento de servirnos nuestro helado! Dos o tres bolas de helado sobre un cucurucho de galleta, una cucharadita de caramelo salado y terminamos decorando con palomitas de caramelo salado… ¡Pecado! esto es pecado seguro 😉
¡Buen provecho!