Buenos días de fiesta para algun@s pero soleado y primaveral para tod@s.
Ayer por la tarde nos visitaron unos amigos que teníamos en común con nuestro querido amigo el Sr. Holmes.
Hacía tiempo que no les veíamos y empezamos a charlar y la merienda se nos alargo a la cena… Nos trajeron un detalle que sabían que nos iban a encantar, unos bombones de After Eight!!
El origen de este bombón surgió en 1962 por una compañía británica Rowntree. El dulce estaba pensado para consumirlo después de una cena, por lo que adquirió el nombre de After Eight (después de las ocho).
Así que nosotros seguimos con su tradición y los tomamos después de cenar pero pense… ¿Por qué no tomarlos en la merienda o en cualquier momento?, así que me decidí a hacer este receta para poder compartirla con todos vosotros. Traigo dos variedades, como las cupcakes que conocemos de buttercream y otra con merengue, más conocidas como Hi-Hat cupcakes.
¡Esperamos que os gusten!
Saludos,
Mr & Mrs Hudson
Ingredientes 10 cupcakes:
- 100 gr de harina
- 20 gr de cacao en polvo sin azúcar (he utilizado Valor)
- 140 gr de azúcar
- 1 cucharadita de levadura
- 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
- una pizca de sal
- 40 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 1 huevo
- 120 ml de leche
- 1/4 cucharadita de extracto de vainilla
Buttercream de After Eight para decorar 5 cupcakes:
- 75 gr de crema de queso tipo Philadelphia
- 50 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 200 gr de azúcar glass
- unas gotitas (4 ó 5) de aroma de menta, recomiendo ir probando a medida que echéis cada una
- colorante en pasta verde
- pepitas de chocolate
Frosting de merengue de After Eight para decorar 5 cupcakes:
- 1 y 1/2 claras
- 120 gr de azúcar
- 1/4 cucharadita de cremor tártaro
- 2 gotas de aroma de menta
- colorante en pasta verde
Cobertura de chocolate:
- 100 gr de chocolate fondant
- 1 cucharada de aceite de girasol
Elaboración:
Precalentamos el horno a 175º C con ambas placas.
En un bol tamizamos la harina junto con la levadura, el bicarbonato y la pizca de sal. Reservamos.
Por otro lado disponemos en un bol amplio la mantequilla a temperatura ambiente junto con el azúcar. Mezclamos hasta integrar bien los ingredientes, nos quedará una textura arenosa.
Añadimos el huevo y batimos con las varillas a velocidad media durante 2 minutos, obtendremos una textura cremosa.
Incorporamos el cacao y volvemos a batir.
Una vez tengamos integrados los ingredientes, incorporamos la mitad de la mezcla de ingredientes secos que teníamos reservados. Unificamos hasta tener una mezcla homogénea.
Incorporamos la mitad de la leche y volvemos a mezclar hasta homogeneizar.
Repetimos la operación con el resto de la mezcla de harina y la leche restante, una cada vez e incorporando bien los ingredientes tras cada adicción.
Preparamos nuestra bandeja con sus cápsulas y rellenamos 3/4 partes cada una.
Introducimos al horno durante 20 minutos o hasta que comprobemos con un palillo que este sale limpio.
Al sacar dejamos reposar 5 minutos en el molde y después pasamos a una rejilla para dejar enfriar.
Preparamos el frosting:
En un bol que soporte el calor, incorporamos las claras junto con el cremor tártaro.
Colocamos el bol al baño maria (sobre un cazo con agua, esta no debe llegar a hervir) y batimos con varillas hasta que espumen bastante. Incorporamos 1/3 parte del azúcar sin dejar de batir.
Una vez observemos que se ha integrado repetimos la operación con las otras 2 partes que quedan por añadir, sin dejar de batir.
Batir bien tras cada adicción.
Incorporamos el aroma de menta y el colorante en pasta, seguimos batiendo. En esta variedad he añadido menos cantidad de colorante, porque me gusta más con una tonalidad más pastel.
Veremos que el merengue irá tomando más consistencia. Ha de quedar muy firme y muy brillante.
Este proceso nos llevará alrededor de 12 minutos.
Debéis hacerlo con varillas eléctricas ya que a mano es muchísimo trabajo.
Una vez tengamos listo nuestro merengue lo dejamos reposar 2 minutos antes de pasarlo a una manga pastelera.
Utilizad una boquilla redonda ancha, en su defecto podéis utilizar directamente la manga pastelera cortando en ella el grosor de la misma que deseéis.
Decoramos cada cupcake con el merengue. Como podéis observar es una variedad de una receta que elaboré recientemente, Hi-Hat cupcakes. Podéis ver una evolución de imágenes más extensa del proceso aquí.
Preparamos la cobertura:
Fundimos el chocolate al baño maria o en el microondas. De hacerlo en este último lo tendremos que hacer en tandas de 40 segundos para asegurarnos de no quemarlo.
Una vez fundido le añadimos la cucharada de aceite y removemos bien. Vertimos el chocolate en una taza muy ancha o un vaso amplio que tenga bastante fondo.
Dejamos enfriar 15 minutos para poder cubrir los cupcakes.
Pasamos a cubrir nuestras cupcakes con el chocolate. Con mucho cuidado las introducimos hasta la base del merengue y sacamos con cuidado dejándola escurrir.
Pasamos a una rejilla y continuamos con el resto.
Una vez las hayamos cubierto, las introducimos en el frigorífico hasta el momento en el que se vayan a consumir.
Preparamos el buttercream de After Eight:
En un bol incorporamos la mantequilla a temperatura ambiente y la crema de queso fria. Batimos hasta homogeneizar ambos ingredientes.
Incorporamos el azúcar glass tamizado y mezclamos para incorporar con la mezcla anterior antes de empezar a batir.
Batimos durante al menos 2 minutos, debemos obtener una mezcla blanquecina y con una textura suave y esponjosa.
Añadimos el aroma de menta y el colorante verde, volvemos a batir para incorporarlos. Añadir el aroma poco a poco y probar tras haber batido, ya que es muy fuerte y podemos pasarnos con mucha facilidad.
Una vez listo, solo nos queda pasarlo a una manga pastelera y decorar nuestras cupcakes!!
Para terminar nuestra pequeña decoración, espolvoreamos con algunos pepitas de chocolate y a saborear se ha dicho!!
Bon appétit!!