Con el frío lo que apetece es consumir platos calientes y las sopas suelen ser una maravillosa opción. Pero, para no tomar siempre el mismo tipo de sopa (que no digo que estén malas, porque una sopa de cocido o picadillo es de lo mejor del mundo) está bien conocer otras opciones como esta sopa de coco y gambas con noodles de té matcha.
Es cierto que este tipo de sopas pueden llegar a ser adictivas, poseen un sabor muy potente y agradable, por no decir que podremos disfrutar de ella en poco menos de 15 minutos. Quizás algunos de sus ingredientes os puedan chocar, como por ejemplo el tamari, pero en caso de no tenerlo se puede reemplazar.
¿Qué es el tamari?
El tamari es un una salsa de soja pura, a diferencia de otros tipos de salsa de soja que podemos encontrar en supermercados. Está fermentada solo con agua y sal durante un periodo largo de tiempo en barriles de cedro (más de un año), lo que nos deja un sabor y aroma más fuerte además de una textura más densa.
En términos nutricionales, contiene más hierro e hidratos de carbono que otros tipos de salsa de soja debido a su proceso de elaboración y es mucho más saludable. Cuando la utilicemos en una elaboración, debemos añadirla siempre al final de la cocción para mantener sus enzimas vivas.
A diferencia del shoyu, que es otro tipo de salsa de soja, esta también se elabora del mismo modo que el tamari pero la soja se muele y tuesta con trigo, lo que la convierte en un producto no apto para celiacos.
Una salsa de soja convencional, además, lleva azúcares, conservantes, aditivos y potenciadores de sabor. De aquí que encontremos una gran diferencia de precios entre una salsa de soja normal y el tamari o shoyu.
El miso
En casa tengo 3 ó 4 tipos de miso diferentes, me gusta mucho utilizarlo en la cocina y suelo mezclar algunos de ellos. El sabor que aporta a los platos es estupendo y ,además, posee muchos beneficios para nuestra salud. En este caso he utilizado una pasa de dashi miso que además lleva caldo de bonito. Por supuesto que podremos utilizar este u otro tipo de miso sin mayor problema.
El mirin y la salsa Oyster, son fáciles de encontrar en supermercados o tiendas especializadas. El resto de ingredientes los tenemos disponibles en mercados y/o supermercados.
Por supuesto que este tipo de sopas se pueden adaptar totalmente a vuestros gusto o a los ingredientes que tengáis en casa. La receta que hoy comparto con vosotros está adaptada de uno de los últimos libros que llegaron a casa en Navidades, Magic Soup, es genialísimo de verdad. Tengo no sé cuantas recetas por hacer, el libro está lleno de marcadores por todos lados… XD
La receta original lleva pack choy en lugar de puerro, brotes de soja natural en lugar de brotes de rábano, utiliza miso blanco, salsa de pescado en lugar de Oyster, otro tipo de noodles, no lleva cilantro, ni cebollino, ni rodajas de chile verde, ni Shichimi togarashi… en su lugar lleva hojas de lima kaffir, pero yo no he dado con ellas en esta ocasión. En el libro, las gambas, van cocidas en el caldo, pero yo preferí hacerlas a parte. Me gusta el sabor tostado y pensé que quedarían mejor de esta manera.
Al final cambié varias cosas, pero la base parte de su receta. Por eso os comento que siempre se pueden hacer ajustes ya sea por falta de ingredientes o porque prefiramos modificar ciertas cosas.
INGREDIENTES PARA LA SOPA DE COCO Y GAMBAS:
2 raciones
PARA LA SOPA:
- 200 g de leche de coco
- 200 g de agua
- 1 cucharadita de Dashi miso
- un chile verde
- 1 cucharadita de citronella seca o una rama si es fresca
- un trozo de 25 g de jengibre fresco pelado
- 1 cucharadita de salsa Oyster
- ralladura de una lima
- 1 cucharadita de mirin
- zumo de media lima
- 120 g de noodles de té matcha
PARA LAS GAMBAS:
- 10 gambones
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 cucharada de salsa de soja
- pimienta Shichimi togarashi al gusto
PARA ACOMPAÑAR:
- 1 puerro
- cebollino
- brotes de rábano
- cilantro finamente picado
- unas rodajas de chile verde
- tamari para servir (o salsa de soja en su defecto)
- rodajas de lima
ELABORACIÓN:
Preparamos la sopa de coco.
- En una olla mediana vertemos la leche de coco junto con el agua, colocamos a calor medio alto y dejamos hasta que llegue a ebullición.
- Una vez que rompa a hervir reducimos el calor y dejamos en una cocción suave.
- Añadimos la citronella junto con el trozo de jengibre, la ralladura de lima, el mirin y la salsa Oyster. Tapamos y dejamos a fuego lento durante 7-8 minutos.
- Retiramos del calor.
- En un cuenco pequeño añadimos el miso junto con una cucharada de sopa, mezclamos hasta obtener una mezcla ligera.
- Vertemos en la sopa, removemos muy bien para integrar por completo y reservamos.
Salteamos los puerros.
- Lavamos el puerro y cortamos por la mitad longitudinalmente.
- Cortamos en juliana muy fina.
- Preparamos una plancha, colocamos a calor medio alto y vertemos un poco de aceite de oliva.
- Una vez que tome temperatura, añadimos e puerro y salteamos durante 1-2 minutos. Debe ablandarse ligeramente.
- Retiramos del calor.
Preparamos las gambas.
- Lavamos las gambas, les retiramos la cabeza y cortamos por la mitad longitudinalmente.
- Limpiamos por dentro.
- Preparamos una plancha y colocamos a calor medio alto.
- Vertemos el aceite y una vez que tome temperatura colocamos las gambas con la parte del caparazón hacia abajo.
- Regamos por encima con la salsa de soja (si hiciera falta más, la utilizamos) y espolvoreamos con la pimienta shichimi togarashi. Dejamos durante 3-4 minutos, observaremos que la carne se vuelve blanca.
- Retiramos del calor.
Preparamos los noodles de te matcha.
- Llenamos una una olla mediana con agua y colocamos a fuego medio alto. Dejamos hasta que llegue a ebullición.
- Una vez que rompa a hervir, añadimos los noodles y dejamos durante 5 minutos. (En este paso fijaos en las instrucciones del envase para llevarlo acabo).
- Retiramos del calor y escurrimos bien.
Servimos la sopa de coco y gambas.
- Repartimos los noodles en dos cuencos.
- Colamos la sopa y repartimos para dos raciones.
- Disponemos por la superficie el puerro junto con los brotes de rábano, el cilantro picado, cebollino y unas rodajas de chile.
- Disponemos las gambas a la plancha en la superficie y servimos acompañado de un poco de tamari.
NOTAS:
- No tengo dashi miso. No pasa nada, podéis utilizar otro tipo de miso que tengáis en casa; blanco, rojo… o aquel que más os guste. En este post os hablo un poco más sobre el miso y sus beneficios.
- No encuentro citronella o lemon grass… en este caso omitidla. El sabor que nos da el ligeramente cítrico, como hemos utilizado lima y jengibre podría valernos aunque si conseguís dar con ella, el sabor será mejor.
- No me gustan las gambas, soy alérgico o vegetariano. Sin problemas, las omitimos. En su lugar podemos utilizar tofu, si queréis, lo salteamos del mismo modo que las gambas y añadimos posteriormente a la sopa.
- ¿Es obligatorio usar noodles de té matcha? En absoluto. En mi caso los compré porque me llamaron la atención pero no he notado ningún sabor en particular a diferencia de otros noodles. Lo único el color ligeramente verdoso.
- ¿Puedo sustituir la pimienta Shichimi togarashi por otra? Por poder, podemos. Es cierto que esta pimienta tiene un sabor muy particular que hace que sea especial gracias al yuzu, las algas… pero podemos utilizar otra en caso de no tenerla.
Esta sopa de coco y gambas se hace en poco más de 10-15 minutos y está absolutamente deliciosa. Su sabor es muy fresco y ligeramente picante, acompañado de las gambas a la plancha nos queda un plato realmente delicioso.
Creo que sin duda es una opción estupenda para hacer una cena o comida rápida, sino disponemos de mucho tiempo. Además nos permite comer bien, un plato caliente y bastante ligero. Yo me estoy enganchando peligrosamente a este tipo de sopas… tanto que como poco caen una vez por semana.
Espero que la disfrutéis 😉
Un abrazo,
Eva
Fuentes: Soy cómo como, Wake the wolves